En el intento de salta a la valla de Melilla murieron al menos 37 personas más, aunque las autoridades siguen hablando de 23 muertes
CEAR comunica que 2.554 personas perdieron la vida en el mar intentado llegar a Europa el pasado año. 12.949 en los últimos cinco años. Son cifras estimadas, porque no hay registro de cuántas embarcaciones se hundieron o perdieron el rumbo y se perdieron a la deriva. «Tampoco sabemos cuántas personas se hundieron en el mar sin dejar rastro. De eso no hay certeza», señala la entidad.
En el intento de salta a la valla de Melilla murieron al menos 37 personas más, aunque las autoridades siguen hablando de 23 muertes. «Y no sabemos cuántas vidas se cobran las arenas del desierto u otros obstáculos que encuentran las personas migrantes en unas rutas migratorias cada vez más peligrosas y mortales«.
Pero tienen certezas. Lo que sí saben es que todas ellas son víctimas de la falta de vías legales. Que se podrían haber evitado. Y que «unas políticas migratorias centradas en los derechos humanos y en las personas son posibles. Se ha demostrado con la acogida a las personas huidas de la guerra en Ucrania. Solo hace falta voluntad política». En CEAR admiten tener la voluntad y la determinación para seguir reclamándolo. Y no van a rendirse.