Desde nuestra responsabilidad y nuestra independencia, animamos a trabajadores y trabajadoras a que participen en esta jornada reivindicativa para sumar esfuerzos, reforzar y ampliar la conciencia colectiva frente a esta lacra social.
En CSIF afrontamos esta jornada con preocupación. El bloqueo político e institucional de los últimos meses también ha afectado a la lucha contra la violencia de género: congelación de recursos, prórrogas presupuestarias, y freno a las políticas.
Los temas relacionados con la violencia de género se han apartado durante este tiempo de la agenda política de fondo (el Pacto de Estado en el Congreso lleva igualmente paralizado más de dos años por la coyuntura política), salvo por momentos coyunturales marcados por casos dramáticos de asesinatos, agresiones y sentencias que reflejan los medios de comunicación.
Asimismo, asistimos con preocupación a la ruptura del consenso en el debate político que afecta tanto a la definición en sí misma de la violencia de género, como a su origen o a las herramientas para combatirla. La violencia machista no se puede cuestionar ni relativizar.
Mientras tanto, el número de mujeres afectadas por esta lacra sigue avanzando: por desgracia, más de 50 mujeres han sido asesinadas en lo que va de año (más de 1.000 desde que se empezaron a contabilizar en 2003), alcanzando las condenas un máximo histórico (el 70,45 por ciento de las sentencias con cerca de 35.000 condenas en 2018) y decenas de miles de órdenes de protección.
La Fiscalía ha alertado del fenómeno de las ‘manadas’ y del aumento de la violencia de género entre jóvenes y adolescentes, que vincula al consumo de pornografía en Internet y el uso indebido de las redes sociales.
Por todo ello, CSIF considera urgente rearmar el pacto de Estado, analizar la situación y desarrollar medidas valientes para estrechar el cerco sobre los maltratadores, también en el ámbito laboral.
Por eso reclamamos:
- Diseñar una estrategia para detectar dentro del ámbito laboral, tanto en el sector privado como en las administraciones públicas, posibles víctimas de violencia de género, con el desarrollo de la figura del delegado/a sindical especializada en Igualdad y Violencia de Género. Según un estudio de CSIF, las mujeres conviven a diario con situaciones machistas en el trabajo, como ejemplo, un 9 por ciento recibe ‘whatsapp’ con contenido sexual.
- Relanzar el Pacto de Estado y un pacto social, en el marco del Convenio de Estambul.
- Dotar cuanto antes de financiación adecuada a las políticas de Igualdad y lucha contra la violencia de género.
La puesta en marcha del pacto de Estado también supone activar medidas incorporadas por CSIF como:
- Cuotas de reserva en las Administraciones Públicas para las mujeres víctimas de violencia de género.
- Protocolo de Movilidad sin menoscabo de sueldo y promoción profesional en todas las Administraciones Públicas, así como incorporar los datos de movilidad de mujeres maltratadas a la Estadística Nacional.
- Impulsar la negociación de los Convenios Colectivos y Planes de Igualdad para el desarrollo de los derechos laborales de las víctimas de violencia machista. – Incorporar el enfoque de la discapacidad.
- Elaborar materiales informativos para madres y padres para detectar la violencia de género de la que pueden ser víctimas o partícipes sus hijas o hijos adolescentes.
- Reforzar la asistencia jurídica a las mujeres víctimas antes, durante y después de todo el proceso judicial.