El ministro de Asuntos Exteriores de Bélgica, Maxime Prévot, confirmó este martes que su país reconocerá al Estado de Palestina durante la próxima Asamblea General de la ONU en Nueva York.
La decisión, explicó Prévot, responde al “drama humanitario en Gaza” y a las “violaciones del derecho internacional cometidas por Israel”. Según subrayó en un mensaje en su cuenta de X, no se trata de un castigo al pueblo israelí, sino de una medida destinada a presionar a su Gobierno para que respete la legalidad internacional.
Junto al reconocimiento, Bélgica impondrá 12 sanciones contra Israel. Entre ellas figuran la prohibición de importar determinados productos, la revisión de contratos públicos con empresas israelíes, restricciones de tránsito aéreo y la declaración de persona non grata para dos ministros israelíes ultranacionalistas, varios colonos violentos y dirigentes de Hamás.
Prévot calificó la iniciativa como un “gesto político y diplomático firme” en favor de la solución de los dos Estados y en rechazo a los programas de colonización y ocupación militar israelíes. No obstante, precisó que la formalización administrativa del reconocimiento se producirá cuando Hamás deje de controlar Gaza y el último rehén israelí sea liberado.
La medida ha puesto fin a días de debate dentro de la coalición gubernamental belga, compuesta por cinco partidos con posturas divergentes sobre el conflicto.
Con esta decisión, Bélgica se suma a Francia, Reino Unido y Australia, que en los últimos meses también anunciaron el reconocimiento de Palestina como vía de presión hacia el Ejecutivo de Benjamín Netanyahu.