La Agencia de la ONU para los Refugiados ha hecho un llamamiento a los Estados europeos para que acojan a las más de 500 personas migrantes y refugiadas rescatadas en el Mediterráneo «de inmediato»
Las 507 personas que se encuentran a la deriva tras ser rescatadas en la ruta del Mediterráneo central precisan desembarcar con urgencia en vista de que se aproximan tormentas y mal tiempo, señaló este martes la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
ACNUR ha exigido a los Gobiernos europeos a que permitan a los dos barcos humanitarios, que transportan a estas personas migrantes y refugiadas, llegar a algún puerto para que se les provea la ayuda vital que necesitan con urgencia.
“Es una carrera contra el reloj. Se esperan tormentas en los próximos días y la situación a bordo de los dos barcos sin duda seguirá empeorando. Dejar en alta mar y en estas condiciones meteorológicas a personas que han huido de la guerra y la violencia en Libia sería infligir aún más sufrimiento a su sufrimiento. Se les debe permitir desembarcar de inmediato y tener acceso a una ayuda humanitaria que tanto necesitan”, ha denunciado el enviado especial de ACNUR para el Mediterráneo central, Vincent Cochetel.
La Agencia de la ONU ha llamado a los Estados europeos señalando que «se tiene que proporcionar un puerto de desembarco seguro de inmediato y compartir la responsabilidad entre los Estados para la acogida tras el desembarco».
Necesidad de asistencia humanitaria
«Aparentemente muchos son supervivientes de horribles abusos en Libia y proceden de países que generan refugiados» han explicado desde ACNUR. «Todos ellos están en necesidad de asistencia humanitaria y algunos han expresado ya su voluntad de pedir asilo» señalan.
Del total de personas a la deriva, 151 se encuentran en la embarcación humanitaria Open Arms y 356 personas han sido rescatadas en los últimos días por Médicos Sin Fronteras (MSF) y SOS Mediterráneo en el Ocean Viking.
En el mismo comunicado ACNUR reprocha la doble vara de medir. Por un lado recuerdan que «muchos líderes europeos expresaron su consternación cuando más de 50 personas perdieron la vida en un bombardeo mientras se encontraban en el centro de detención en Tajoura, en Libia, y cuando 150 más murieron en el mayor naufragio ocurrido en el Mediterráneo en 2019″. Por otro lado piden que, en base a esta consternación, «estos sentimientos se tienen que traducir ahora en una verdadera solidaridad con las personas que huyen de Libia«. Por este motivo exigen a los Estados europeos que proporcionen el acceso al territorio y a los procedimientos de asilo para aquellas personas que soliciten protección internacional.
Papel de los barcos de rescate humanitario
En lo que va de 2019, se han registrado unos 600 muertos o desaparecidos en el Mediterráneo central, la ruta más socorrida entre las personas que intentan la travesía del norte de África a Europa. Desde ACNUR recuerdan que en el Mediterráneo central es donde más gente muere, comparando las llegadas y muertes en las rutas del Mediterráneo occidental y oriental.
El organismo de la ONU señala que se deben incrementar los operativos de búsqueda y rescate y destacó el papel de los barcos de las ONG, llamando a reconocer y apoyar su trabajo. “El papel de los barcos de las ONG debe ser reconocido y apoyado. Sus esfuerzos están salvando vidas y no deben ser estigmatizados y criminalizados por ello».
ACNUR agregó que hacen falta más medidas para proteger a los refugiados de los peligros en Libia y consideró que nadie debería sentir que es mejor arriesgar su vida y la de su familia en estos viajes por mar, a menudo fatales. “Urgen vías legales más rápidas para el asilo y esto tiene que incluir la evacuación y reubicación de las personas”, indicó.
Para concluir, la Agencia insistió en que la intensificación de los enfrentamientos en Libia, así como las violaciones de derechos humanos, son muestras de que ese país no puede ser catalogado como un puerto seguro y, por lo mismo, no se debe retornar ahí a nadie.