La consejera de Sanidad, Servicios Sociales, Menores e Igualdad, Adela Nieto, ha firmado hoy con el presidente de la asociación Acción por la Visión Infantil, Javier Garnica, un convenio de colaboración para dar continuidad al plan para la detección de problemas visuales en la escuela, iniciado en 2016, y por el que se revisará la visión de más de 1.500 escolares ceutíes de 5 y 6 años.
Acción por la Visión infantil, constituida en junio del pasado por los ópticos participantes en aquel programa inicial, se encargará, en colaboración con la Consejería, de aplicar un protocolo de actuación normalizado que incluye pruebas de agudeza visual, coordinación ocular, visión binocular y de refracción a la población infantil de 5 años poder detectar estos problemas a tiempo. Serán cinco ópticos, en dos grupos de trabajo, los que en coordinación con la Consejería, que ha destinado a esta iniciativa un presupuesto inicial de 7.000 euros, y con los directores de los centros educativos, se encargarán de los exámenes.
Detectar problemas de agudeza visual
La programación de estas nuevas revisiones obedece a las conclusiones extraídas por los ópticos que realizaron la campaña anterior, y en la que detectaron que el 74 % de los menores de 7 años que necesita gafas está sin corregir y que el 19,6 % no ha podido desarrollar al 100 % su agudeza visual por problemas no corregidos, según los datos del estudio coordinado por Javier Garnica. Este estudio se realizó tras examinar a 1.534 niños de 5 y 6 años y también determinó que el 7,76 % no ha podido desarrollarla una agudeza por encima del 50 % en alguno de sus dos ojos y todo ello sin tener en cuenta a los que utilizan gafas, que tan solo suponen el 6,78 %.
Los datos que arroja este estudio ponen de manifiesto la necesidad de implantar procedimientos en todos los colegios de la ciudad para detectar problemas visuales que retrasan el desarrollo de la agudeza visual (AV), y que de no detectar y corregir a tiempo puede generar un déficit visual permanente (ambliopía) y el consiguiente perjuicio en el menor, lo que puede repercutir tanto en el rendimiento académico como en el desarrollo su visión. Los casos detectados se derivarán (a través de Pediatría) a los servicios de Oftalmología, para confirmar los problemas detectados, de forma que al mismo tiempo se establecerá un vínculo profesional entre los optometristas participantes y los servicios de Oftalmología con el único objetivo de proteger la salud visual desde la infancia.