«Apelo a su benevolencia y generosidad», ha pedido el portavoz del Gobierno, Jacob Hachuel. «Las obras son inevitables», ha explicado a raíz de la denuncia que el sindicato UGT hizo de las condiciones en las que tiene que trabajar la policía local.
Seis trabajadores de la central denunciaron, a partir de UGT, que la nueva ubicación era “un lugar insoportable de trabajo“. Desde el organismo creen que se ha hecho “caso omiso” a otras medidas correctoras impuestas por el Servicio de Prevención. Jacob Hachuel lo ha lamentado pero ha insistido que no se puede hacer más. Ha recordado que estos
También ha explicado que Tragsa está en la redacción del proyecto de remodelación integral del edificio, por lo que parece que la paciencia de los y las agentes de Policía Local tendrá que ir para largo.