El líder de Caballas, Mohamed Alí cree que en el Caso Gran Vía debería ser el Gobierno de la Ciudad, como máxima responsable, y no un funcionario interino, en este caso el arquitecto Jesús Gentil, quien respondiese ante los tribunales.
Según el líder de Caballas, ha sido la Consejería de Fomento quien se ha saltado la normativa “a la torera” y en vistas a lo sucedido estudian solicitar una pericial al juzgado.
En respuesta alas declaraciones del Consejero de Fomento, Nestor García León, quien adjudica a Caballas la pretensión de paralizar la obra y perjudicarles, Alí opina que “en ningún caso se trata de eso. Sería una irresponsabilidad por nuestra parte porque entendemos que no procede dado el avanzado estado de las obras. No queremos causar ningún perjuicio”.
La solicitud de la prueba del perito tendría por objetivo avalar que esos aspectos técnicos,como el Plan Especial de Perigrafía, de los que, según Alí, “adolece el proyecto, ni siquiera se incluyeron y se han obviado”.
Alí afirma que en Caballas, “respetamos que el Gobierno conforme sus propias prioridades”, aunque para ellos “la obra es innecesaria, están actuando en zonas que no estaban mal”.Pero lo más grave sería que “la obra en un inicio se anuncio por un montante total de 1,2 millones de euros y ahora mismo está costando nueve millones a las arcas públicas”. Un baile de cifras que ha impulsado a la formación Caballa a interponer esta denuncia por vía judicial. Según Alí alguien tenía que denunciar lo que está sucediendo y “llamados por el principio de responsabilidad hemos puesto pie en pared y dado la voz de alarma”.