La humorista y periodista Ana Polo ha revelado públicamente que sufrió abusos por parte de Quim Morales mientras trabajaba como becaria en un programa de RAC1. La denuncia ha generado una ola de reacciones en el sector de los medios y ha reabierto el debate sobre el abuso de poder en el ámbito laboral.
Ana Polo, reconocida humorista y periodista, ha hecho una denuncia pública en la que acusa a Quim Morales, conocido presentador de RAC1, de haber abusado de ella durante su periodo de prácticas en la emisora. Polo, quien ha ganado popularidad por su estilo crítico y su enfoque en temas de género y derechos humanos, decidió compartir su experiencia a través de sus redes sociales, donde detalló los hechos ocurridos mientras trabajaba como becaria.
En su declaración, Polo afirmó que los abusos comenzaron cuando ella era una joven recién llegada al mundo de la radio y se encontraba en una posición vulnerable. Según su testimonio, Morales utilizó su posición de poder para cometer actos que ella calificó como inaceptables, afectando gravemente su bienestar durante ese periodo.
La denuncia ha provocado un gran revuelo en el sector mediático, con numerosas figuras públicas y colegas mostrando su apoyo a Polo y exigiendo una investigación exhaustiva. Organizaciones defensoras de los derechos de los trabajadores y colectivos feministas también se han sumado al llamado para que se tomen medidas inmediatas contra el abuso de poder en los entornos laborales.
Quim Morales, por su parte, no ha emitido hasta el momento un comunicado oficial respondiendo a las acusaciones. RAC1, la emisora donde ocurrieron los hechos, ha anunciado que llevará a cabo una revisión interna para esclarecer lo sucedido y asegurar un entorno de trabajo seguro para todos sus empleados.
Este caso se suma a una serie de denuncias similares que han salido a la luz en los últimos años, evidenciando un problema sistémico en varias industrias y subrayando la importancia de crear mecanismos de protección para las personas en situaciones de vulnerabilidad laboral.
