CSIF, CCOO, SATSE, Sindicato Médico, USAE y UGT se han concentrado esta mañana en el centro de Salud del Recinto con el eslogan «Salvemos la Sanidad de Ceuta» y han suscrito el manifiesto unificado en el que una mejora en la calidad de vida de la plantilla que redundará en la atención sanitaria de la ciudadanía
La Junta de Personal de INGESA se ha concentrado esta mañana a las puertas del centro de salud del Recinto para exigir una sanidad pública y de calidad. Con el eslogan «salvemos la sanidad de Ceuta», han estado representadas las organizaciones sindicales de CSIF, CCOO, SATSE, Sindicato Médico, USAE y UGT, quienes han suscrito el manifiesto. El secretario de organización de CCOO, Ángel Lara, ha dejado claro que todo lo que están reivindicando no solo va en beneficio de los y las trabajadoras del INGESA, sino que va a redundar en la ciudadanía, puesto que es la mejora de la calidad de vida de la plantilla, y a su vez, una mejora en la atención a los pacientes «para que tengamos una atención sanitaria digna como establece la Constitución Española«.
Lara ha trasladado el deseo de las organizaciones sindicales de que los y las sanitarias tengan los mismos derechos en Ceuta, que tienen en el resto de la Península. «El Ministerio de Sanidad lleva años teniendo una deriva con respecto a la sanidad en Ceuta y en Melilla, ya que durante estos años hemos visto cómo no se han ido adecuando el número de trabajadores al número de población», ha subrayado el secretario de organización de CCOO, que ha denunciado que las plantillas han ido menguando, así como la desestructuración que supone la temporalidad, la falta de procesos de estabilización de empleo para que los profesionales puedan establecerse en la ciudad, entre otros asuntos.
Del mismo modo, ha recordado que la pandemia ha evidenciado el agravamiento de todos estos problemas y ha puntualizado que la brecha tecnológica ha impedido que las personas mayores puedan acceder a la sanidad en igualdad de condiciones. «Tenemos unas listas de espera desvocadas, tenemos los peores indicadores según las estadísticas del SNS, que nos ponen en el último lugares en profesionales como médicos, pediátras, enfermeras, auxiliares de enfermería, celadores«, ha señalado el representante de la Junta de Personal de INGESA.
Sus reivindicaciones están claras, que se revierta la situación para recuperar lo perdido en los últimos años «para no ser la comunidad con los peores datos». El de CCOO ha recordado que Ceuta «tendría que tener ya un cuarto centro de salud», sin embargo, reprocha que llevan «toda la pandemia arreglando el tercero», lo que califica «de vergüenza». Sus quejas las ha dirigido a la directora del INGESA y a la ministra de Sanidad, indicando que son quienes tienen que poner «el foco en la sanidad de Ceuta». Por último, denuncian que tienen una «negociación colectiva congelada» y piden la activación inmediata de la mesa sectorial.
Manifiesto de la Junta de Personal de INGESA. “Es tu derecho. Por una Sanidad Pública de Calidad en Ceuta»
Las políticas aplicadas por el Ministerio de Sanidad han supuesto que:
-El informe anual del SNS que publica el ministerio. Aplicando una perspectiva comparativa entre las diferentes autonomías las conclusiones de este informe son demoledoras:
-Tenemos el menor número (por población) de médicos de familia, pediatras, especialistas y enfermeras de todo el país, la peor ratio de centros de salud por población de España y lo anterior sin contar con el aislamiento geográfico que padecemos.
-Todo lo expuesto nos lleva a pensar que los ciudadanos de Ceuta y Melilla son tratados como ciudadanos de segunda o tercera. El término desolador no se queda corto en absoluto para describir la sensación que transmite la comparativa de la situación de salud de nuestras ciudades con las del resto de sistemas autonómicos de salud.
-Una Atención Primaria absolutamente colapsada que ha sufrido el deterioro de los valores que la hicieron grande y apreciada por la ciudadanía, además de la pérdida de las actividades de promoción y prevención de la salud que actualmente y en un futuro tendrá repercusiones gravísimas en enfermedades crónicas como, por ejemplo, en el diagnóstico del cáncer en estadios avanzados.
-La pérdida de accesibilidad a la sanidad pública, que se evidencia con colas interminables de usuarios en las puertas de los centros de salud, grandes listas de espera.
-Aumento de la brecha digital con la exclusión del sistema sanitario público de personas mayores, colectivo muy vulnerable que requiere de atención preferente.
-Alta tasa de temporalidad y precariedad laboral de los trabajadores del INGESA (algunas categorías llevan más de una década sin convocar oposiciones).
– Negociación colectiva paralizada en el INGESA, lo que provoca que no se pueda avanzar en lo relativo a las condiciones de trabajo de los profesionales del INGESA.
Por todo ello, nos movilizamos para exigir al Ministerio de Sanidad que garantice:
-Una sanidad pública humanizada donde el usuario y el profesional sean el centro del sistema en una perfecta integración.
-Recuperar lo recortado en los últimos años, incrementando el presupuesto, así como invertir de manera clara en el capítulo 1 (recursos humanos) y ofertar empleo público estable y de calidad, estabilizando las plantillas mediante la convocatoria de Ofertas de Empleo Público (OPE) con la suficiente periodicidad.
-Que se tomen las medidas oportunas para que adecúen los recursos humanos a las necesidades asistenciales y se establezcan unos límites a las agendas y a la actividad diaria que debe asumir cada trabajador en Atención Primaria.
-Garantizar unos centros de salud abiertos, accesibles, próximos a toda la población y sin listas de espera.
-Dar prioridad a las consultas presenciales. Las consultas telefónicas y telemáticas deberán tener un papel no discriminatorio para personas mayores o con dificultades para manejar las nuevas tecnologías.
-Mejorar la relación con el nivel hospitalario, potenciar los procesos asistenciales como base de la atención de salud, coordinados desde la Atención Primaria, incrementando su capacidad resolutiva.
-Garantizar la participación y empoderamiento de los ciudadanos para la promoción de salud y la mejora de los servicios sanitarios.
-Se debe dotar a la Atención Primaria de los recursos necesarios y suficientes para realizar actividades formativas, docentes y de investigación, para conseguir niveles de excelencia.
-Una mayor inversión en nuestro sistema sanitario público que redunde en un aumento significativo de los recursos humanos y de las infraestructuras necesarias para atender a la población de nuestra ciudad.
-Exigir, igualmente medidas efectivas y mejoras significativas en nuestras condiciones de trabajo, reducción de la temporalidad en nuestro sistema sanitario, así como activación inmediata de la negociación colectiva en el INGESA.
-Convocatoria inmediata de la Mesa Sectorial estableciendo un cronograma de materias a tratar con reuniones, al menos, mensuales y con sesiones monotemáticas, para impulsar la negociación colectiva en el INGESA.
La deriva de la sanidad pública actual nos hará perder lo que nuestros mayores consiguieron y nosotros heredamos. Lo paramos ahora o los ceutíes perderemos este patrimonio y pasarán muchos años hasta poder conseguir el nivel de calidad del Servicios de Salud que necesitamos.