La Fiscalía Anticorrupción ha abierto una investigación contra el partido político Vox por un posible caso de financiación irregular. La indagación surge a raíz de una denuncia presentada por el PSOE, después de conocerse que la formación liderada por Santiago Abascal recibió un préstamo de un banco húngaro.
Según fuentes cercanas al caso, el préstamo en cuestión provendría de una entidad financiera con vínculos con el Gobierno de Hungría, encabezado por el primer ministro Viktor Orbán. Este hecho ha levantado sospechas sobre una posible vulneración de la legislación española en materia de financiación de partidos políticos, que prohíbe la recepción de fondos extranjeros.
El PSOE ha argumentado en su denuncia que este préstamo podría suponer una injerencia externa en la política española y ha solicitado que se investigue si Vox ha incumplido la normativa vigente. Desde la formación de Abascal, sin embargo, han rechazado cualquier irregularidad y han defendido la legalidad de la operación, asegurando que el préstamo fue gestionado de manera transparente y conforme a la normativa española.
La investigación de Anticorrupción se encuentra en una fase preliminar, en la que se recopilará información sobre la operación financiera y sus posibles implicaciones legales. En caso de confirmarse irregularidades, Vox podría enfrentarse a sanciones o incluso a una causa judicial.
Este caso se suma a otras controversias recientes en torno a la financiación de partidos políticos en España, poniendo nuevamente sobre la mesa el debate sobre la transparencia y el control de los recursos económicos de las formaciones políticas. La Fiscalía continuará con sus pesquisas para determinar si existen indicios de delito en la financiación de Vox.
