Antonio Maíllo, coordinador federal de Izquierda Unida (IU), ha reiterado su compromiso con la creación de una candidatura unificada de la izquierda en España. En una entrevista reciente, Maíllo destacó la importancia de superar las divisiones internas y trabajar juntos hacia un objetivo común: gobernar el país y construir una sociedad más justa.
Maíllo enfatizó que esta unidad no debe basarse en el ‘buenismo’ o en ser mejores o peores, sino en la necesidad de crear un instrumento político eficaz. Según él, la izquierda es, por naturaleza, un espacio donde la unidad es esencial. Esta declaración parece dirigida a otras formaciones de izquierda como Sumar y Podemos, aunque no las mencionó explícitamente.
El líder de IU abogó por una metodología clara para formar alianzas, sugiriendo elecciones primarias y un censo acordado entre partidos para medir la correlación de fuerzas. Criticó a Sumar por no aplicar este principio en las elecciones del 23J, lo que, según él, fue un error estratégico.
Maíllo también alertó sobre las ‘disidencias’ dentro de la izquierda, que a menudo surgen por ‘ojerizas personales’. Estas divisiones, argumenta, impiden la implementación de políticas progresistas que garanticen derechos básicos como vivienda y salarios dignos. Para él, las cuestiones personales no deben condicionar la construcción de un proyecto político sólido.
En cuanto a las desavenencias históricas dentro de la izquierda, Maíllo señaló que, en términos programáticos, rara vez ha habido problemas para llegar a acuerdos. Recordó ejemplos de colaboración exitosa en propuestas legislativas y reformas sociales.
Finalmente, Maíllo comentó sobre la decisión de Isabel Díaz Ayuso de no reunirse con el presidente Sánchez, describiéndola como un símbolo de ruptura institucional. Este tipo de acciones, según él, diluyen la imagen del PP como partido de Estado.