El juez Peinado, quien lleva el caso de Begoña Gómez, ha decidido aplazar su declaración como investigada hasta el 18 de diciembre. Esta decisión se produce en respuesta a la solicitud de la defensa de Gómez, quien argumentó la necesidad de cambiar la fecha debido a la visita oficial a Brasil del presidente Pedro Sánchez, a la cual ella está invitada.
Las acusaciones populares, representadas por grupos como Vox, Iustitia Europa, Hazte Oír y Manos Limpias, habían solicitado al juez que impusiera restricciones más severas a Gómez, incluyendo la retirada de su pasaporte y la obligación de comparecer quincenalmente. Sin embargo, el juez Peinado consideró estas medidas como «innecesarias y desproporcionadas».
El caso gira en torno a la contratación de un software en la cátedra que Gómez codirigió en la Universidad Complutense de Madrid (UCM). Se le imputan dos nuevos delitos relacionados con esta contratación, lo que ha intensificado el escrutinio sobre sus actividades profesionales y académicas.
En paralelo a estos eventos judiciales, Begoña Gómez asistió a una comisión de investigación en la Asamblea de Madrid. Esta comisión busca determinar si hubo «trato de favor» en la creación de su cátedra en la UCM. Durante su intervención, Gómez optó por no declarar, pero aprovechó para criticar lo que considera un «objetivo político evidente» detrás de la comisión, impulsada por el Partido Popular.
La situación ha generado un debate público sobre la influencia política en los procesos judiciales y académicos. Mientras algunos defienden la integridad profesional de Gómez, otros cuestionan las circunstancias que rodean su carrera académica y las decisiones judiciales recientes.
El aplazamiento de la declaración y la negativa a imponer restricciones adicionales han sido interpretados por algunos como una señal de confianza en que Gómez no tiene intención de eludir la justicia. Sin embargo, las acusaciones populares continúan expresando su preocupación por la posibilidad de que Gómez pueda influir en el proceso desde el extranjero.
Este caso sigue siendo un tema de interés nacional, no solo por la figura de Begoña Gómez, sino también por las implicaciones políticas y legales que conlleva. A medida que se acerca la nueva fecha de declaración, se espera que tanto la defensa como las acusaciones preparen sus argumentos con mayor intensidad.