El 1 de julio de 2019 en un centro de menores de Almería fallecía un joven al que se la había aplicado el «protocolo antisuicidio». En su momento, el caso fue archivado al considerarse una «muerte accidental». Sin embargo, la familia, en total disconformidad con la sentencia, presento un recurso. Ahora una filtración del vídeo revela que durante 13 minutos Ilias estuvo soportando la presión de la rodilla de uno de los guardas de seguridad en su espalda, aún estando completamente atado a la cama
En su momento, la jueza que llevó el caso de la muerte de Ilias lo archivó al considerar el suceso como una muerte violenta accidental. Esta decisión indignó a la familia del joven y, en especial a su madre, quien señaló que su hijo sufría malos tratos en el centro y que sospechaba que la muerte de Ilias era un «asesinato» y no un accidente. Es por ello que la familia de Ilias presentó un recurso.
Este martes, según el diario El País, se ha publicado la filmación íntegra que capta los 13 minutos que duró el «protocolo de contención» o «protocolo antisuicidio» que se le aplicó a ilias Tahiri, revela que uno de los guardas mantuvo su rodilla presionando la espalda del joven durante los 13 minutos, incluso después de haberle colocado todas las sujeciones y de estar completamente inmovilizado.
En un fragmento del vídeo publicado por el medio nacional, se aprecian hasta cinco y seis personas a la vez sujetando las extremidades del joven y colocándole las respectivas sujeciones. En ningún momento, al menos en el fragmento que muestra El País, se observa que Ilias oponga resistencia o trate de evitar que lo sujeten.
Una de las cuestiones que todavía están por esclarecerse en este caso es por qué los trabajadores del centro de menores almeriense contravinieron su propio protocolo que deja claro que cuando se aplica esta medida coercitiva «con carácter general, la posición del menor en la cama será de decúbito supino (boca arriba), salvo que por prescripción médica u otras circunstancias justifiquen o aconsejen la posición de decúbito prono (boca abajo)”.
El centro en cuestión está gestionado por GINSO, que fue denunciada por Podemos en 2018 por formar, presuntamente, parte de la financiación ilegal del PP de Madrid en época de Esperanza Aguirre y que carga con otro fallecimiento de un menor, Ramón Barrios, en 2011, en un centro precisamente de Madrid, al que se le aplicó el mismo protocolo que a Ilias.