El presidente de Azerbaiyán, Ilham Alíyev, ha exigido a Rusia que asuma su responsabilidad en el accidente del avión de pasajeros de Azerbaiyán Airlines (AZAL) que se estrelló en Kazajistán, causando la muerte de 39 personas. En una entrevista con AzTV, Alíyev detalló las demandas presentadas a Rusia.
En primer lugar, Azerbaiyán solicitó disculpas, las cuales fueron ofrecidas por el presidente ruso Vladímir Putin en una llamada telefónica, expresando su pesar por el incidente ocurrido en el espacio aéreo ruso. Sin embargo, Rusia aún no ha admitido responsabilidad alguna en el siniestro.
Además, Alíyev exige que los culpables sean identificados y castigados, y que se ofrezcan compensaciones tanto al Estado azerbaiyano como a las familias de las víctimas. Estas demandas, según Alíyev, se basan en prácticas internacionales comunes.
El accidente ocurrió cuando el avión, un Embraer 190, intentaba aterrizar en Grozni, Rusia, pero fue desviado a Aktau, Kazajistán, donde se estrelló. Según Alíyev, el avión sufrió interferencias externas mientras volaba sobre territorio ruso, lo que causó que perdiera el control.
Un grupo de expertos internacionales ha sido convocado para investigar el accidente. Las cajas negras del avión serán analizadas en Brasil, en el Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos (CENIPA), dado que Embraer es el fabricante del avión.
La investigación se llevará a cabo con total transparencia, y se informará periódicamente al público sobre su progreso. Azerbaiyán espera que Rusia coopere plenamente en este proceso para esclarecer las causas del accidente y evitar futuros incidentes similares.
El presidente Alíyev ha expresado su confianza en que las demandas de Azerbaiyán serán cumplidas, subrayando que no son exigencias fuera de lo común. La comunidad internacional observa de cerca cómo se desarrollan los acontecimientos entre estos dos países.