La Avenida Martínez Catena se convirtió esta mañana en un verdadero caos debido a una inesperada reparación vial realizada en pleno horario punta. La intervención provocó un embotellamiento considerable que afectó tanto a trabajadores como a estudiantes, quienes llegaron tarde a sus lugares de destino.
El inicio de los trabajos, programados aparentemente sin previo aviso, coincidió con el momento de mayor tráfico en la zona, lo que generó largas filas de vehículos y retrasos generalizados. «Estuvimos más de 20 minutos atrapados . Nadie entendía qué estaba pasando ni autoridad alguna regulando el tráfico «, comentó un conductor afectado.
Padres y estudiantes se quejaron de los inconvenientes. «Llegamos tarde al colegio porque la calle estaba totalmente bloqueada. Si van a hacer reparaciones, deberían elegir horarios menos conflictivos», señaló una madre indignada.