Un servicio que, según la organización sindical, «se ha demostrado absolutamente fundamental para el transito fronterizo fluido y que ha beneficiado a la ciudad al completo, pero que parece que ha dejado de ser prioritario para las autoridades de la Ciudad»
Los trabajadores de la seguridad privada han vuelto a concentrarse este jueves frente a la Delegación del Gobierno para denunciar la «situación de incertidumbre» que están padeciendo los integrantes de la plantilla que presta servicios en la frontera. Harán lo mismo a las 12:00 horas a las puertas del Palacio Autonómico. Un servicio que, según la organización sindical, «se ha demostrado absolutamente fundamental para el transito fronterizo fluido y que ha beneficiado a la ciudad al completo, pero que parece que ha dejado de ser prioritario para las autoridades de la Ciudad«.
El enlace sindical de CCOO en Eulen, Javier Ríos, informa que la manifestación se ha repetido como consecencia de la falta de información sobre la petición de actualización del convenio colectivo para adaptarlos a las necesidades actuales y evitar más despidos. «No entendemos cómo no siguen manteniendo esos efectivos, y más con la apertura de la aduana comercial que vamos a tener», indica el sindicalista, que denuncia la «escasez» de vigilantes y la «incertidumbre» ante este proceso. En estos momentos hay 26 trabajadores en activo y ya han sido 31 los despidos acumulados del personal.
«Queremos recuperar esos puestos de trabajo. La seguridad privada está pasando por un momento crítico, tanto por el intrusismo laboral por parte de Amgevicesa como por los despidos», remarca Ríos, que advierte que van a continuar con las movilizaciones hasta que haya respuestas. Por último, ha remarcado que «con la plantilla que hay no se hace notar la seguridad privada en la frontera», argumentando que antes, los trabajadores servían de apoyo a los agentes de la Guardia Civil a la hora de inspeccionar vehículos, tardando segundos en ello.
Así afecta la falta de vigilantes de la seguridad privada en la frontera
El principal cometido de estos vigilantes es el desarrollo de una labor de complementariedad y subordinación a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado «con óptimos resultados«, que han tenido como consecuencia el orden, la regulación interior de vehículos y personas en el interior de la infraestructura y, en los momentos más álgidos de la pasada OPE, el mantenimiento más ágil de los flujos de vehículos en el último tramo de la Nacional-352 en colaboración con la Guardia Civil.
El sindicato recuerda el acuerdo que hubo entre la Delegación del Gobierno y la Ciudad Autónoma de Ceuta durante la crisis migratoria para que se diera un servicio de vigilancia de seguridad privada en la frontera. Un servicio que, habida cuenta del paso del tiempo, se ha demostrado que «ha servido para la fluidez fronteriza, y que ha beneficiado al tránsito de personas y de vehículos en las épocas de más afluencias de personas».
Por todo lo anterior, los profesionales de la seguridad privada han instado a la organización sindical a convocar varias concentraciones para reivindicar un nuevo convenio entre la Administración General del Estado y la Ciudad Autónoma de Ceuta, adaptado a las actuales circunstancias, «se dimensione económicamente las verdaderas necesidades, teniendo en cuenta los momentos de aumento del tránsito fronterizo que se prevén para Ramadán, Semana Santa y OPE 2023, amén del día a día y con especial atención los fines de semana para que el usuario no vea mermada su atención, en términos de orden y agilidad y, por supuesto, se defiendan los puestos de trabajo de los profesionales de la seguridad privada».