Asimismo, la organización sindical exige más medidas de seguridad para evitar situaciones como la de la trabajadora social agredida por un usuario habitual del servicio
CCOO denuncia el cierre de la Unidad de Trabajo Social del centro como consecuencia de una situación que se venía advirtiendo por parte de las trabajadoras sociales. Dicha situación ha acabado en la agresión de un usuario habitual del servicio, quien ha tenido que denunciar los hechos y de forma particular ir a juicio para obtener una orden de alejamiento de su agresor y encontrarse de baja médica por accidente laboral. «Entendemos necesario hacer memoria sobre los diferente altibajos sufridos por este servicio que nació en el año 2003«, han señalado refiriéndose al proyecto «necesario y de modernización» de los Servicios Sociales de la Ciudad.
La organización sindical ha recordado que esta UTS se vió «desmantelada» en el año 2013 cuando se dejó de abonar el alquiler del local ubicado en la calle La Legión, para trasladarse la barriada de San José Hadú. Para CCOO, este servicio de vigilancia privada es «imprescindible para el normal desarrollo de la actividad profesional», pero afea que se haya dejado «olvidada» esta gestión durante dos años consecutivos en los Presupuestos de la Ciudad.
«Hay que señalar que las profesionales que desarrollan su actividad laboral en dicho servicio venían avisando por escrito a las responsables del servicio de diferentes hechos acaecidos de situaciones similares y demandando la necesidad de la gestión inmediata del servicio de seguridad privada encontrando la callada por respuesta porque la Consejería dice no tener partida económica para tal fin», remarcan.
La solución dada por parte de la Consejería es la del cierre de la UTS Centro, algo que CCOO entiende como un «gran error y una nefasta gestión» por parte de los responsables de la Consejería. Por ello, desde CCOO exigen que la consejera del área «solucione el problema y no creando otro trasladando el servicio a la UTS S. José». «Los Servicios Sociales no son un instrumento político, sino un servicio esencial enfocado a las ciudadanos/as más desfavorecidos de nuestra ciudad, por lo que reiteramos la exigencia de solución del contrato de vigilancia de seguridad y que se olvide del cierre de un servicio básico y necesario para los ceutíes».