Desde la Secretaría General de FFSS de CCOO de Ceuta queremos transmitir nuestras condolencias a la familia destrozada por la pérdida de una vida apenas en sus inicios. No hay palabras de consuelo para unos padres que pierden a un hijo, no está dentro del orden natural de asunción de nuestra mortalidad. Nos resignamos a perder a nuestros abuelos, padres y tíos, pero no queremos ni siquiera pensar en la posibilidad de que un hijo pueda fallecer. Por eso no tenemos un palabra para ello. Huérfano es quien pierde a sus padres, viudo el que pierde a su cónyuge, pero… ¿encontramos nombre para el que pierde un hijo?. No.
Si no queremos ni siquiera verbalizar la realidad del fallecimiento de un hijo, mucho menos podemos admitir que sea a consecuencia de un acto violento, realizado por alguien que no sabe vivir en sociedad ni seguir las reglas del juego que permiten la convivencia. Desde CCOO deseamos que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, bajo el mando de nuestra Delegada del Gobierno, atrapen y pongan a disposición de la justicia al responsable de tan execrable acto, lo antes posible. Quizás así la familia pueda tener algún consuelo.
Pero ningún dolor por un acto violento justifica más violencia. Los trabajadores del INGESA, para poder desarrollar su labor, deben disponer de un clima laboral de respeto y orden, máxime cuando ninguno de ellos es responsable, siquiera tangencialmente, de tan lamentable fallecimiento. Es más, si en otras ocasiones, tras un suceso violento, ha conseguido sobrevivir la víctima, ha sido gracias a la labor que se realiza tanto en el Servicio de Urgencias Hospitalarias, como en el resto de Servicios y Unidades del HUCE y de nuestra Área Sanitaria, desde el personal administrativo, celadores, personal de enfermería, TCAE, técnicos de rayos o de laboratorio, facultativos, personal de Evacuaciones cuando ha sido necesario…
No hay ninguna justificación para amenazar e insultar a quienes precisamente intenta salvar vidas, ni para destrozar un edificio público que es de todos, está al servicio de la comunidad, y que se sufraga con nuestros impuestos.
Desde CCOO mostramos nuestro apoyo incondicional a los trabajadores del INGESA, y nuestra total repulsa a cualquier manifestación violenta, a cualquier agresión en el ámbito sanitario (y fuera de él).
Aprovechamos para hacer un llamamiento al INGESA-Ceuta para que tome las medidas oportunas en defensa de sus trabajadores, para que estos lamentables incidentes no se repitan y no vuelvan a ser noticia.