Comisiones Obreras ha denunciado la falta de diálogo por parte de la Ciudad en la elaboración de un nuevo plan estratégico para Ceuta, en el tanto los sindicatos, como la Delegación del Gobierno, han quedado al margen
CCOO ha anunciado que ha tenido conocimiento, por los medios de comunicación, de que el Gobierno de la Ciudad anda elaborando otro proyecto estratégico para Ceuta. Incluso, han afirmado, al parecer, ya lo ha negociado y pactado con las asociaciones empresariales.
Desde Comisiones, han denunciado que “los sindicatos y la propia Delegación del Gobierno han quedado al margen de tan ambiciosa iniciativa.”
El sindicato ha insistido en que “la sindicalismofobia que aqueja al desangelado y decadente Presidente (motivada bien como tributo a sus socios de extrema derecha, bien como infantil represalia por las lógicas críticas a su nefasta gestión) le impide restablecer el Diálogo Social. Por otro lado, y probablemente por imposición de la extrema derecha, también han prescindido del concurso de la Delegación del Gobierno, pasando por alto el pequeño detalle de que es el Gobierno de la Nación quien va a pilotar la gestión del Fondo de Reconstrucción que financia lo proyectado”.
Simultáneamente, ha añadido CCOO, han tenido conocimiento de que existe una nueva edición del documento de las 140 Medidas que se pretende someter a la consideración del Pleno y han denunciado que, “entre ambos documentos “estratégicos” no existe la menor coincidencia ni coordinación”.
Añaden, desde el sindicato, que tan solo existe un elemento común, recurrente y persistente, entre los dos documentos: los llamamientos a la unidad. Algo que les parece “Todo un esperpento. El aliado, valedor y cómplice de los rupturistas de la convivencia apelando a la unidad de todos los ceutíes”, han declarado.
Por todo ello han afirmado que “Ceuta, en esta tesitura, no se merece estar dirigida por un “pollo sin cabeza” que ha perdido toda referencia del interés general y se limita a impulsar una portentosa maquinaria de propaganda vacía, anunciando y enunciando cosas que nunca pasan (y ya nadie cree); con la única intención de blanquear una gestión infame”.