Correos ha reunido telemáticamente a los sindicatos para anunciar la ejecución ya prevista antes de la crisis del COVID de incorporación de 4.055 personas. Según los sindicatos, esta actuación estaba pendiente de ejecutar a raíz de la extensión del contrato a 7.000 eventuales el pasado mes de abril.
CCOO y UGT, sindicatos mayoritarios de Correos, han calificado el anuncio de la incorporación de 4.055 empleos fijos a la plantilla de la empresa postal pública (una actuación de obligado cumplimiento por parte de la empresa y recogida en los acuerdos firmados con las OOSS) de “utilización política, personalista y propagandística de los acuerdos” y de “operación de marketing y lavado de cara por parte del presidente y del equipo directivo de Correos”.
CCOO y UGT, que han denunciado en varias ocasiones el «incumplimiento» por parte de Correos del marco de negociación colectiva, con la formación de contratos al margen del convenio colectivo y la imposición de medidas que «se han saltado los cauces legales de negociación», consideran que este anuncio está siendo utilizado «de forma torticera como mera cortina de humo ante el alto grado de rechazo sindical y conflictividad laboral provocado por la pésima gestión de la crisis sanitaria en Correos».
Las organizaciones sindicales han denunciado, desde el inicio del estado de alarma, las «carencias en seguridad y medios de protección durante semanas, que colocaron a la plantilla de Correos como el segundo colectivo con mayor número de contagios, tras el sanitario». En este sentido CCOO y UGT han anunciado que, ante la «precipitada» desescalada de actividad anunciada días atrás por parte del presidente de Correos, exigirán la realización de test y la toma de temperatura a los empleados postales para garantizar la protección debida y evitar la «desgraciada situación sanitaria producida en Correos el pasado mes de marzo como consecuencia de la irresponsabilidad cometida por el presidente de Correos el lunes día 16 de marzo al enviar a trabajar sin EPI a miles de trabajadores».
En este sentido, CCOO y UGT han recordado que, tanto las 4.055 personas que se incorporarán a la plantilla en julio, como la formalización de la convocatoria de las nuevas 3.421 plazas, que ya fueron aprobadas en diciembre pasado, «son cumplimientos legales de acuerdos suscritos con anterioridad» que la empresa está “sacando a la reventa” a modo de campaña de propaganda personal por parte del presidente de la compañía, Juan Manuel Serrano, que está «poniendo los recursos públicos de Correos al servicio de su imagen y carrera personal«.
«A juicio de ambos sindicatos, en un contexto en el que los trabajadores y trabajadoras de Correos han demostrado con creces estar a la altura de las exigencias del estado de alarma y han garantizado la prestación del servicio postal universal como esencial para la ciudadanía, la noticia sería el incumplimiento de acuerdos ya cerrados».
Por ello, los sindicatos han instado a Correos a que acelere y lo haga por los cauces legalmente establecidos) el cumplimiento del resto de materias comprometidas con la plantilla y ya acordadas con CCOO y UGT, entre otras los incrementos salariales pendientes desde enero, el trabajo voluntario en sábados, el Plan de Igualdad y Diversidad, calendario laboral 2020, programa de sustituciones, convocatorias de Jefaturas de Equipo, de Unidad y de Técnicos, solución al parque móvil de los rurales, el plan de excedencias voluntarias incentivadas y el de jubilaciones parciales.