CEAR se suma a la campaña para solicitar al Gobierno español que se adhiera a la demanda por genocidio del pueblo palestino presentada por Sudáfrica contra Israel ante el Tribunal Internacional de Justicia
El pasado 29 de diciembre, Sudáfrica demandó a Israel por vulnerar la Convención sobre el Genocidio ante el Tribunal Internacional de Justicia, el máximo órgano judicial de las Naciones Unidas. España, en vista de sus obligaciones internacionales como Estado signatario de la Convención sobre Genocidio, debe adherirse a la iniciativa sudafricana de manera oficial y respaldarla públicamente para que Israel rinda cuentas por las gravísimas vulneraciones de derechos cometidas contra el pueblo palestino.
Se estima que a fecha 4 de enero del 2024, más de 22.000 personas palestinas han sido asesinadas, casi la mitad de ellas niños y niñas. Hay más de 55.000 heridos, y miles de personas más aún permanecen bajo los escombros. Casi el 90% de la población de Gaza ha sido desplazada forzosamente y se enfrenta a niveles críticos de hambre. La situación es absolutamente demoledora e insostenible, y requiere de acciones urgentes y contundentes por parte de la comunidad internacional.
El Gobierno sudafricano, junto con la Plataforma Palestina de ONG (PNGO) y el Comité Palestino de Organizaciones de Derechos Humanos (PHROC), ha hecho un llamamiento a terceros estados para que se sumen a esta importante iniciativa por las implicaciones que puede tener para salvar vidas palestinas. Especialmente por la petición de imposición de medidas cautelares, que reduciría la capacidad de Israel para seguir desarrollando operaciones militares en la Franja de Gaza.
España, como Estado parte de la Convención sobre el Genocidio y tal como ha recordado recientemente el Comité de Naciones Unidas por la Eliminación de la Discriminación Racial a todos los estados firmantes de la misma, debe “respetar su obligación para prevenir el genocidio”. Esto es, tiene la obligación de actuar y ésta es una oportunidad única para enviar un mensaje claro: los crímenes de guerra y de lesa humanidad no quedarán impunes.
Sumándose a esta iniciativa para proteger la supervivencia del pueblo palestino, España se pone del lado de los derechos humanos. No hay tiempo que perder. Son millones de vidas las que están en juego.