Desde la Confederación de Empresarios de Ceuta manifiestan la incertidumbre que les suscita la situación generada en la Autoridad portuaria tras la dimisión voluntaria del todavía presidente, Rafael Rodríguez Valero, que se hará efectiva el próximo 1 de febrero.
Desde la CECE intuyen que la actividad puede verse afectada «en la tramitación de expedientes administrativos y otros asuntos de importancia para la actividad económica del Puerto y la Ciudad. Muchas empresas, titulares de concesiones administrativas, de ocupaciones de superficies o relacionadas con actividades portuarias, transmite la Confederación, «han manifestado su preocupación por la falta de Presidente del Puerto y las consecuencias que ello puede tener en los procedimientos abiertos que pueden quedar paralizados frenando inversiones y la consiguiente creación de puestos de trabajo».
Desde la Confederación se alerta de que «el Puerto junto al tránsito fronterizo constituyen los principales motores de la actividad económica local». Expresan que «ambos motores se encuentran sumidos en una situación de gran incertidumbre al no existir planes de desarrollo a medio o largo plazo, improvisando la ciudad su desarrollo». La CECE se explaya en sus quejas al señalar que «a dicha incertidumbre se unen los anuncios de cierre de dos de las más importantes firmas implantadas en el Puerto y la paralización de otros expedientes que facilitarían la entrada de importantes operadores». Para los empresarios sería «imperdonable que problemas internos de la Autoridad Portuaria, frenaran el desarrollo económico de nuestra Ciudad».