La Consejería de Fomento, Medio Ambiente y Servicios Urbanos, a través de la empresa municipal Obimace, ha lanzado una licitación para la renovación completa de once parques infantiles con un presupuesto base de 989.000 euros. Este proyecto busca mejorar y reponer los elementos deteriorados por uso intensivo o vandalismo, asegurando la seguridad y el valor lúdico de las zonas de juego
La Consejería de Fomento, Medio Ambiente y Servicios Urbanos de Ceuta, a través de la empresa municipal Obimace, ha publicado en la Plataforma de Contratación del Sector Público una licitación para la renovación integral de once parques infantiles. Con una inversión de 989.000 euros, se pretende realizar una intervención completa de mejora y reposición de los elementos de juego más concurridos y deteriorados.
Antes de esta licitación, los técnicos de Obimace realizaron inspecciones en los parques infantiles, elaborando un inventario detallado que identificó las áreas que requieren una renovación completa. Hasta ahora, las mejoras se realizaban de manera puntual y localizada.
Este proyecto abarca la sustitución y reposición de elementos de juego, suelos de seguridad, vallados y mobiliario urbano, todo diseñado para cumplir con los máximos niveles de seguridad y accesibilidad. Se incluirán elementos de juego inclusivos y temáticos, como juegos relacionados con la naturaleza, navegación y la época medieval, adaptados a cada entorno.
Los parques a renovar incluyen los ubicados en San Amaro, parque urbano Juan Carlos I, Glorieta del Teniente Reinoso, Jardines de Elena Sánchez, Plaza Infante D. Fernando, explanada Príncipe Felipe, Parques de Ceuta (fase II), Avenida Lisboa, Marina Española (dos), Paseo Marítimo de Benítez y Miramar Bajo. La intervención cubrirá unos 3.400 metros cuadrados de zonas de juego, que serán dotadas de pavimento neumático y techadas.
Además, Obimace reutilizará elementos recuperados de parques anteriores en otras treinta zonas de juego infantiles de la ciudad, asegurando que todas las áreas estén dotadas de mobiliario y elementos adecuados a las necesidades de cada barriada. Todos los elementos de juego deberán ser resistentes a los agentes atmosféricos y la corrosión marina, y cumplir con las normas de accesibilidad universal para ser inclusivos.