La sanidad ceutí atraviesa una crisis sin precedentes. El Sindicato Médico de Ceuta ha denunciado la ausencia total de psiquiatras en activo en el hospital de la ciudad, lo que ha provocado el colapso del servicio de salud mental y ha obligado a derivar pacientes a la Península.
La situación, calificada de “límite” por los profesionales, ha dejado sin atención incluso a pacientes con riesgo vital por intentos autolíticos. Desde el pasado 14 de julio, el servicio de urgencias psiquiátricas está prácticamente desatendido.
Según el sindicato, la raíz del problema se encuentra en la “gestión negligente del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa)”, que no habría respondido a tiempo a la sobrecarga y precariedad del área de psiquiatría en el hospital.
Una cadena de bajas previsible
De los cuatro psiquiatras que conformaban el servicio, tres están actualmente de baja médica –una por maternidad y dos relacionadas con el entorno laboral–, mientras que el cuarto, que ya tenía concedida la exención de guardias por salud, fue obligado a reincorporarse a los turnos, lo que precipitó una nueva baja.
Como resultado, Ceuta ha quedado sin ningún especialista en salud mental en activo.
Derivaciones sin cobertura formal
La respuesta inmediata ha sido la derivación de pacientes a hospitales de la Península, concretamente al Hospital de Puerto Real (Cádiz). No obstante, desde el sindicato advierten que esta orden no se ha formalizado por escrito y se está actuando bajo una “instrucción verbal”, lo que genera inseguridad jurídica tanto para los profesionales como para los pacientes.
En algunos casos, se ha delegado la atención en médicos internistas sin formación específica en salud mental, una práctica que el Sindicato Médico califica de “inaceptable”.
Riesgos para los pacientes y los profesionales
“La situación es crítica”, alerta el colectivo médico. No hay cobertura para brotes psicóticos, intentos de suicidio ni para los pacientes ya ingresados, y se han cancelado cientos de consultas sin previsión de recuperación a corto plazo.
“El abandono institucional por parte del Ministerio de Sanidad es evidente”, denuncian. “Nos preguntamos quién se hará cargo de los pacientes ingresados, cómo se manejarán los casos de riesgo vital y hasta cuándo los ciudadanos de Ceuta deberán soportar este nivel de precariedad asistencial”.
Llamado a una intervención urgente
El Sindicato Médico exige al Ministerio de Sanidad y al Ingesa una actuación inmediata, así como un plan de contingencia urgente que permita restablecer el servicio de psiquiatría en la ciudad. También advierten del riesgo psicosocial que esta situación representa para los pacientes, muchos en situación de especial vulnerabilidad.
Finalmente, el colectivo no descarta acciones legales para depurar responsabilidades y garantizar la atención que la ciudadanía merece.
