Durante el Debate del Estado de la Ciudad, la formación Ceuta Ya expresó su profunda preocupación por la situación en Palestina y condenó las acciones perpetradas por el Estado de Israel contra la población palestina en Gaza
Se hizo hincapié en la necesidad de condenar sin tapujos ni matices la limpieza étnica y la política de aniquilación que aún persisten en la región.
El portavoz de Ceuta Ya lamentó que la institución no haya sido capaz de tomar medidas más contundentes que simplemente convocar un minuto de silencio, que a su parecer no diferencia entre víctimas y verdugos. Se cuestionó al Presidente de la Ciudad, Juan Vivas, sobre la prometida ayuda humanitaria de 100.000 euros a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos, la cual se había solicitado hace meses. Se criticó que el gobierno haya condicionado esta ayuda a una reunión previa con el Ministro de Asuntos Exteriores, algo que, según el portavoz, no fue necesario para enviar ayuda humanitaria a otros países como Ucrania o Turquía.
El portavoz expresó su indignación ante la falta de transparencia sobre el destino de esta ayuda y calificó la situación como «una auténtica vergüenza». Además, se mencionó el apoyo de Ceuta Ya a la Flotilla de la Libertad, que partió rumbo a Gaza en ese mismo día.
En otro aspecto, se criticó la política racista y genocida del Estado de Israel y se hizo un llamado a no dejar de hablar de Palestina. Se destacó la importancia de no secundar políticas antisociales del Partido Popular y se denunció un «bochornoso espectáculo de chantaje, mentira y traiciones» que ha afectado la estabilidad de la ciudad. Se señaló que durante casi un año, los ceutíes han sido testigos de un esfuerzo del Gobierno del Partido Popular por complacer a concejales de otros partidos en un acuerdo que ha resultado en consecuencias negativas para la ciudadanía humilde.
Por otra parte, el partido Ceuta Ya expresó una fuerte crítica hacia las políticas implementadas por el Partido Popular, que, según ellos, desprecian a una parte significativa de la población ceutí. Se destacó que otorgar estabilidad a las políticas públicas del Partido Popular resulta en la humillación de gran parte de la comunidad, especialmente de los jóvenes que se sienten marginados en su propio territorio y ven su futuro fuera de Ceuta. Se resaltó la situación de aquellos que carecen de influencias para acceder al Ayuntamiento y de aquellos que esperan durante años para ser incluidos en el Plan de Empleo.
Se criticó el debilitamiento del tejido social y la desaceleración económica provocada por estas políticas. Se subrayó que una parte importante del electorado del Partido Popular, que goza de empleo público, no se ve afectada por estas medidas. Sin embargo, se puso de relieve la otra cara de Ceuta, la de aquellos que sufren desempleo y carecen de acceso a una vivienda digna.
Se cuestionó al gobierno por su negativa a desarrollar una política de vivienda y a limitar el precio de los alquileres, lo que conduce a miles de ceutíes a vivir en condiciones deplorables y hacinamiento. Se afirmó que estas políticas empujan a la pobreza a muchas familias ceutíes, perpetuando la denominada «pobreza intergeneracional». Además, se abordó la situación de los jóvenes invisibles para el gobierno, quienes padecen el fracaso escolar y son excluidos del sistema político.
Ceuta Ya instó al gobierno a reflexionar sobre estas políticas y a tomar medidas para abordar las necesidades de la población más desfavorecida, en lugar de ignorarlas bajo el pretexto de no tener competencia.