oincidiendo con la semana en que se celebra el Día Mundial de la Dermatitis Atópica, el Consejo General de Enfermería en colaboración con CERAVE han elaborado una completa infografía y un vídeo animado con claves para el cuidado de esta enfermedad. La dermatitis atópica es una de las patologías de la piel más frecuentes, sobre todo en la infancia, donde su prevalencia alcanza hasta el 20%. Con el paso del tiempo, tiende a desaparecer, sin embargo, en los casos en los que permanece, suele revestir mayor gravedad.
Con la llegada del otoño las personas con pieles atópicas tienden a ver cómo su problema se acentúa y aquellos que habían pasado un verano más o menos tranquilo -gracias a los beneficios de la exposición solar- vuelven a sufrir los síntomas de una enfermedad que no da tregua. La dermatitis atópica es una disfunción de la barrera cutánea que se caracteriza por el eczema, el prurito, el engrosamiento de la epidermis y la sequedad. Sólo la constancia en los cuidados y el tratamiento permiten reestablecer la barrera cutánea, reducir o hacer desaparecer las lesiones y con ello controlar el intenso que picor al que se asocian.
Dentro de la campaña ‘En la piel de la enfermera‘, puesta en marcha por el Consejo General de Enfermería y CERAVE con el objetivo de potenciar la formación enfermera en el cuidado y prevención de las afecciones de la piel, ambas entidades, coincidiendo con la semana en que se celebra el Día Mundial de la Dermatitis Atópica, acaban de presentar una infografía y un vídeo animado que recogen los principales cuidados de las pieles atópicas. En ella han participado dos enfermeras, Mª Cruz Pérez Llorente, de la Unidad de Dermatología y Venerología del Hospital Río Hortega de Valladolid, y Guadalupe Fontán, del Instituto de Investigación Enfermera del Consejo General de Enfermería, junto al dermatólogo Álvaro González Cantero, del Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid y del Grupo Pedro Jaén.
Romper la espiral del picor
Los materiales recogen los cuidados esenciales que deben seguir las personas con pieles atópicas, algunos relacionados con su higiene y cuidado diarios, como la hidratación dos veces al día con un emoliente adecuado y sin perfume y otros asociados a cuestiones como el tipo de ropa, el hogar o el estilo de vida. En este sentido, María Cruz Pérez Llorente hace hincapié en que “la constancia es esencial cuando hablamos de dermatitis atópica. La hidratación debe ser diaria, las duchas cortas y con agua tibia y hay que evitar frotar la piel. Por ello, hay que evitar el uso de esponjas y para secarse, por ejemplo, recomendamos emplear toallas de algodón y hacerlo a pequeños toques, sin fricción”.
Uno de los síntomas más molestos que sufren estos pacientes es el del picor que llega a ser muy intenso y desemboca en el rascado de la piel y en un picor aún mayor, generando una espiral de la que es difícil salir y puede desembocar en lesiones que llegan incluso a infectarse. Para romper con esta espiral, apunta Guadalupe Fontán, debemos “recurrir siempre al tratamiento farmacológico que se haya prescrito por el profesional sanitario y nunca automedicarse”. Además, se recomienda utilizar productos hidratantes que sean emolientes y conservarlos en la nevera -puesto que el frío contribuye al alivio-, y técnicas como la del pijama húmedo o la aplicación de vendas mojadas.
Para Álvaro González Cantero, “la formación de los pacientes y de sus padres, cuando hablamos de niños, es fundamental para conseguir el correcto control de la enfermedad. Muchas veces, cuando nos llega un paciente nuevo que ya ha probado varios tratamientos y no sabe qué hacer, la clave no está tanto en cambiar el tratamiento como en que sepa cómo y cuándo debe aplicarlo y conozca los cuidados que pueden ayudarle. Para ello, es fundamental contar con enfermeras expertas que les expliquen paso a paso estos cuidados, resuelvan sus dudas y les ayuden a incorporarlos a su día a día”. De hecho, asegura que, “en el caso de los niños, por ejemplo, con una información adecuada, una buena hidratación y algún antiinflamatorio tópico conseguimos controlar la mayor parte de los casos”.
Apuesta por la formación e investigación
Estos materiales son los segundos que el Consejo General de Enfermería y CERAVE presentan conjuntamente fruto de su colaboración. Como explica el presidente del Consejo General de Enfermería, Florentino Pérez Raya, “’En la piel de la Enfermera’ es una campaña de amplio recorrido que se inició hace unos meses y contempla varias acciones, todas ellas dirigidas a enfermeras. Comenzamos en abril con la realización de seminarios web que están teniendo una acogida espectacular, con miles de enfermeras inscritas, y el lanzamiento, a finales de julio, de los primeros materiales para el cuidado de la barrera cutánea, comprometida en múltiples afecciones. Además, hemos puesto en marcha la primera beca ‘En la piel de la enfermera’, una oportunidad para que nuestras profesionales puedan presentar un proyecto dirigido a mejorar la calidad de vida de las personas a través del cuidado de la piel. De todas las ideas que se reciban, aquella que resulte ganadora obtendrá 6.000 euros para llevarla a cabo. Desde aquí animo a todas nuestras enfermeras a participar porque, insisto, creemos que es un gran oportunidad”.
Por su parte, Isabel Castillejo, directora de Relaciones Médicas de L’Oreal Cosmética Activa, ha destacado el compromiso decidido de Cerave para ayudar a “contribuir a la mejora de la calidad de vida de las personas a través del cuidado de la piel y de forma muy especial en pacientes con dermatitis atópica; donde la enfermería juega un importante papel en el cuidado de estos pacientes. Por ello, estamos muy orgullosos de haber puesto en marcha este proyecto en colaboración con el Consejo General de Enfermería; un proyecto que bajo el lema “En la piel de la enfermera” engloba diferentes acciones como la infografía y el video animado que han presentado sobre los cuidados básicos en la dermatitis atópica, donde Cerave gracias a las ceramidas que contiene en su formulación ha demostrado tener un impacto beneficioso tanto en los signos visibles como en los síntomas, mejorando la calidad de vida de estas pieles”.