Cuando la plataforma comenzó esta lucha, desde el gobierno de la ciudad todo era un No Rotundo al presente y al futuro de nuestro “Eid Al Adha”, tal como lo conocemos hasta ahora. Hoy se ha conseguido un No al sacrificio con normalidad, conocido por las circunstancias para este año presente y un Sí Inamovible que será Legislado y que Garantizara nuestro Futuro Inmediato INSHA ALLAH, sentando las bases para que la celebración de nuestro Ritual del Sacrificio “ Eid Al Adha” no sea nunca más cuestionado y jamás oigamos decir: “QUE SE NOS HIZO Y HACE LA VISTA GORDA”.
Una Plataforma creada para defender sin titubeo y sin miramientos los intereses de nuestra comunidad, compuesta por un importantísimo tejido Social, vecinal, cultural y religioso de nuestra ciudad, prestando todos ese apoyo tan necesario, llegando a tener incluso el apoyo de Asociaciones vecinales cuya presidencia es de otro credo, porque veían como algo injusto lo que le estaba pasando a la comunidad musulmana, acto que agradecemos infinitamente. Un equipo de personas que han estado al frente en esta lucha día y noche desde el anonimato más absoluto durante semanas y sin descanso, porque lo que más les importa por encima de todo, es su fe. Se habrán hecho las cosas mal, regular o bien, pero lo que sí es seguro y de lo que nadie puede dudar jamás, es que todo por lo que se ha luchado y se seguirá luchando se ha hecho por nuestra fe y en defensa de nuestro Eid Al Adha, buscando solo expresamente el reconocimiento de Allah swt (Dios).
En referencia a los acuerdos obtenidos el día 20 de Julio de 2020, entre el Gobierno de la Ciudad y la Plataforma de la Comunidad Musulmana de Ceuta, cuyo acuerdo fue rubricado por la Delegación de la Comisión Islámica de España en Ceuta como ente jurídico, siendo esta partícipe de dichos acuerdos, demostrando así su compromiso y apoyo a esta.
La Plataforma de la Comunidad Musulmana quiere hacer llegar a nuestra comunidad y a toda la Ciudadanía el siguiente manifiesto en relación a los puntos acordados, reconocidos y firmados.
A raíz de los hechos acontecidos en relación al Ritual del Sacrificio “ Eid Al Adha”, donde se percibió que por parte del Gobierno de Ciudad había una ruta marcada para la no celebración de dicho sacrificio, tal como lo conocemos hasta ahora y que se venía haciendo desde tiempos milenarios en nuestra Ciudad, siendo este un derecho establecido y garantizado.
Pero la gravedad de esa hoja de ruta marcada mediante los famosos informes, era que todo esto afectaba tanto al año en curso 2020, como a los años venideros para la celebración del Ritual del Sacrificio “Eid Al Adha”, quedando constancia de ello en todas las reuniones mantenidas con la Plataforma de la Comunidad Musulmana y en todas las intervenciones públicas por parte del Gobierno de la Ciudad, viéndose claramente que el tema sanitario o Covid-19, no era el único trasfondo para la no celebración.
Esta plataforma entendió que era algo inaceptable, injusto e inadmisible para nuestra comunidad y así lo defendimos hasta el último aliento, dada la gravedad del asunto de lo que estaba en juego para nuestra comunidad “nuestro Ritual del Sacrificio Eid Al Adha” Presente y Futuro, dado que todo lo expuesto en dichos informes, tanto sanitarios como legislativos presentados, era un ataque para erradicar dicho Ritual del Sacrificio tal como se conoce en nuestra Ciudad. Desde la plataforma hemos venido defendiendo, porque así lo entendimos que todos esos argumentos eran perfectamente subsanables, mediante la aplicación de un protocolo acorde a la celebración del “Eid Al Adha” y que los temas legislativos tenían solución alternativa para ellos. Ya que la cuestión que nos trasladaron no era expresamente solo sanitaria.
Fruto de todo lo luchado y conseguido mediante las intensas negociaciones y reuniones con el Gobierno de la Ciudad por parte de la Plataforma, a su vez con el incondicional apoyo de toda la comunidad musulmana es lo siguiente:
Punto 1 de los acuerdos firmados:
- Afirmación por parte del Gobierno de la Ciudad, quedando así reflejado mediante acuerdo firmado, que el único motivo, por lo que se verá afectado nuestro Ritual del Sacrificio Eid Al Adha 2020, es estrictamente sanitario.
- Reconocimiento por parte del Gobierno de la Ciudad, quedando así reflejado mediante acuerdo firmado, que se podía haber elaborado un plan de actuación acorde al dicho Ritual.
- Desde la Plataforma aceptamos este criterio sanitario, ya que mediante este reconocimiento por parte del Gobierno de la Ciudad, queda reflejado que es estrictamente motivo sanitario y no otro, dando ejemplo una vez más del alto grado de responsabilidad por parte de la Comunidad Musulmana.
Punto 2 de los acuerdos firmados:
- Reconocimiento por parte del Gobierno de la Ciudad, quedando así reflejado mediante acuerdo firmado, que el Gobierno no ha tenido ni tiene la intención de suprimir dicho Ritual del Sacrificio en los años venideros.
- Queda bien aclarado por ambas partes, que el Ritual del Sacrificio Eid Al Adha, nada tiene que ver con el día festivo en el calendario laboral. Ya que sin el sacrificio como tal, no existe festividad.
Punto 3 de los acuerdos firmados:
- Compromiso por parte del Gobierno de la Ciudad, quedando así reflejado mediante acuerdo firmado, de la constitución de un grupo de trabajo inminente (10 de Agosto 2020) conjuntamente el Gobierno de la Ciudad y la Comunidad Musulmana.
- El objetivo será asentar las bases para que se regule mediante legislación vinculante las condiciones y medidas de la resolución, que garantizara el futuro de esta celebración del Ritual del Sacrificio Eid Al Adha en nuestra ciudad, con total normalidad a partir del ejercicio de 2021.
- De igual modo, os comunicamos que vamos a estar haciendo un seguimiento continuo, para que las buenas intención que han marcado el acuerdo presente, no caiga en saco roto.
Rebeca Benarroch, Directora General de Sanidad de la ciudad de Ceuta, declaró en su día que una Directiva de la Unión Europa (UE) señalaba los mataderos como lugares en donde se debía llevar a cabo los sacrificios de animales por el rito religioso. Asimismo, la señora Benarroch señalaba que sacrificar animales en otros lugares que no fueran los mataderos era un foco de infección.
Pero está visto que los prebostes de la comunidad musulmana no entienden de Directivas de la UE, tan solo de que lo que «más les importa, por encima de todo, es su fe». «Y que todo lo que se ha luchado y se seguirá luchando se ha hecho por nuestra fe y en defensa de nuestro Eid Al Adha, buscando solo expresamente el reconocimiento de Allah».
Según este comunicado de la comunidad musulmana, pertener a la religión musulmana está por encima de cualquier ideología cívico-político, incluso patriótica. Lo cual es de temer porque guiarse por los sentimientos religiosos en vez de civico-políticos conduce a un retroceso en el tiempo y en el espacio, como se manifiesta explícitamente en este comunicado: «(…) tal como lo concocemos (el sacrificio) hasta ahora y que se venía haciendo desde tiempos milenarios en nuestra ciudad, siendo este un derecho establecido y garantizado». He aquí expuesto con meridiana claridad que, en espíritu, los musulmanes de Ceuta aún creen que viven en tiempos anteriores a 1415. Han pasado algo más de 600 años y Ceuta pertenece a un Estado europeo en el que las religiones no deben ni pueden chantajear al Estado, Estado en el que lo confesional nada tiene que ver con lo político. Y aún peor, es deseo de esa comunidad, al parecer, retroceder a aquellos tiempos anteriores a 1415. Parece que no se sienten cómodos viviendo en un Estado aconfesional, que, aunque tenga conciertos con las religiones, no debe, en modo alguno, dejarse claudicar por ritos religiosos ni por ninguna clase de fe.
Lo normal sería celebrar el próximo año el Ritual del Sacrificio en el matadero, así que hay todo una año para prepararlo, en mejorar las condiciones higiénicas así como en la contratación de matarifes. Pero en modo alguno celebrar la matanza de animales en las carpas callejeras ni en los domicilios paticulares. So pena que queramos volver a tiempos anteriores a 1415.
Si el futuro de Ceuta es una «lucha» entre la comunidad musulmana y el gobierno de la Ciudad (sin que sea un gobierno PSOE-partidos musulmanes) la convicencia será aún más enrarecida de lo que es actualmente.
Ese es el problema de las comunidades musulmanas establecidas en territorios europeos, que en cuanto alcanzan la masa crítica demográfica pretenden ‘romper la baraja’ y exigir la fe y la religión y la sumisión a Allah como únicos parámetros para convivir con otros grupos no musulmanes. Feo asunto ese y feo futuro nos aguarda, no solo a Ceuta, sino a las ciudades europeas en donde esa masa crítica musulmana demográfica aumenta como la espuma, por la biología y por las migraciones masivas y la acogida de refugiados procedentes de paises arabo-islámicos.
Como sigas llamando a la puerta del diablo, antes o después, alguien te la abrirá, dice el adagio.
El tono empleado en este comunicado por la Plataforma de la Comunidad Musulmana me ha hecho recordar el artículo aparecido en El País en 2015, titulado «Ceuta, base de operaciones del yihadismo». Bajo el epígrafe «Burkas’ por la calle Real», se dice que en Ceuta hay 32 mezquitas y 23 «asociaciones o lugares de culto», según los archivos de Laarbi Maateis, el controvertido líder de la comunidad musulmana que aglutina –según sociólogos locales– a más de 45.000 personas de los 85.000 habitantes que tiene Ceuta. Fuentes policiales amplían los musulmanes nacionalizados españoles hasta 60.000 –»aunque no todos vivan en la ciudad»–, y subrayan que en 1985, antes de la entrada en vigor de la Ley de Extranjería, «eran solo un millar frente a 65.000 ceutíes».
Maateis es el promotor –continúa El País– del movimiento islámico Tabligh, caracterizado por su rigorismo y con una vertiente caritativa-asistencial. Cogió fuerza en los años noventa frente a la escuela Maliki, más moderada y la oficial marroquí. Pero desde hace dos años –recuérdese que el artículo es de 2015– ha dejado de recibir las subvenciones anuales –de entre 40.000 y 120.000 euros– del consistorio ceutí. «Porque no les invitamos a una fiesta del cordero», dice, dejando ver la brecha abierta entre musulmanes y cristianos. «El ayuntamiento se ha dado cuenta tarde de lo que estaba financiando y ha querido recular», asegura una educadora social. Maateis –sigue El País–, que condena enérgicamente a los terroristas pero regatea en todas las bandas y que es tan respetado como temido porque es «el que corta el bacalao», es uno de esos «buenos musulmanes» –así los califica él– que suelta cosas como: «¡Claro que la mujer musulmana debe cubrirse!», «el 016 ha hecho mucho daño porque ha roto matrimonios», «la limosna es el impuesto de la religión», «nuestro índice de natalidad triplica –atento a esto– al de los cristianos, así que lo que no consigamos ahora lo haremos dentro de unos años, cuando ocupemos sus bancos», «si todos fuésemos musulmanes –ojo a esto– no habría ningún problema».
Una vez leídas las declaraciones de este preboste musulmán, cabría la posibilidad de que para dejar de ser una comunidad minoritaria e igualarse a la comunidad mayoritaria, la cristiana, tal vez se habría hecho un llamamiento a la comunidad musulmana para aumentar la masa crítica demográfica y, asi, dejar de ser minoritaria, e igualarse a la cristiana. Ello ha traído consigo que ese aumento demográfico de la comunidad musulmana no ha ido acompañado de un desarrollo material que cubriera las necesidades de ese aumento tan exponencial. En otras palabras, no pocas familias jóvenes han tenido que acudir a los Servicios Sociales para atender sus necesidades. Y el aumento desaforado de casas construidas ilegalmente en parcelas arrebatadas al Municipio es consecuencia de ese aumento exponencial de la comunidad musulmana. Ceuta no debería tener más de 65.000 o 70.000 habitantes como mucho, sin embargo, su población oscila entre 85 mil y 86 mil, para 20km2 escasos.
Por otro lado, habría que fijar la atención en lo último que declara Maateis: «nuestro índice de natalidad triplica al de los cristianos –ese era el objetivo–, así que lo que no consigamos ahora lo haremos dentro de unos años cuando ocupemos sus bancos», (¿en las plazas?). «Y si todos fuésemos musulmanes –¡ah, se trataba de eso!– no habria ningún problema».
El «espíritu» de lo que declaraba Maateis en aquel artículo de El País de 2015 está recogido en el escrito de la Plataforma de la Comunidad Musulmana.
Me temo que el futuro de esta ciudad va a ser muy problemático, vistas las declaraciones de Maateis y el tono empleado en este comunicado. Se sienten víctimas de su propio victimismo. O aceptáis esto o rompemos la baraja. Estamos circulando por el siglo XXI y miran por el retrovisor a los años anteriores al 1415. Mal asunto ese.
Me temo, y me preocupa, que se vaya a confeccionar un modelo de convivencia a la medida de una de las comunidades que forman la sociedad ceutí. Modelo que acaso no amparase a las otras comunidades.
El tiempo lo dirá.
Ver http://politica.elpais.com/politica/2015/11/27/actualidad/1448613233_142739.html
venga a chuparla cristianos, cuando se prohiba la tortura del toroy la matanza del cerdo venis y me lo decis jijiji
que se puede esperar de un gentuza que le da una medalla una virgen jijiji