Según el barómetro de electromovilidad de ANFAC correspondiente al primer trimestre del año 2021, nuestro país se sitúa a la cola de Europa en penetración del vehículo eléctrico y en instalación de puntos de energía. Nuestra Ciudad en la actualidad solo tiene cinco de estos puntos instalados, de los 400 puntos que deberá tener por obligación en 2030.
CSD piensa que los grandes olvidados de la revolución de electromovilidad son las personas con movilidad reducida, que más allá de optar la ayuda por parte del Ayuntamiento para acogerse al Plan MOVES, se ven con la problemática de no gozar de apoyo a nivel normativo e institucional. Los vehículos pueden estar adaptados pero otra cosa es poder recargar en estos puntos.
Esta formación exige una campaña que pide el acceso igual para todas las infraestructuras de recarga .Todas estas personas cada día luchan por sentirse inclusivas en una sociedad que los ignora. Por ello esta formación solicita también que se actualicen las ordenanzas con normativas que palien estas deficiencias.
Contigo se preguntas si las infraestructuras de Ceuta son las idóneas, ya que parecen estar muy lejos de serla y que no sirven para la comunidad con movilidad reducida.
Carbonell responsable de Expansión de CSD se plantea si los puntos de recarga actuales que existen en la Ciudad están adaptados para una silla de ruedas, porque entre la calzada y el punto de recarga en sí, quedan aproximadamente a unos 40 centímetros del alcance de una persona con sillas de ruedas y que aun arrimándose al bordillo al máximo, sigue habiendo dificultades para salir del vehículo.
Enviamos un mensaje a las personas que carecen de cualquier tipo de movilidad para que respeten y que no ocupen las plazas PMR, o las reservadas para vehículos eléctricos con un vehículo convencional. Recordar a la Administración que la Ordenanza aprobada, sea aplicada, ya que en los Plenos salen muchos proyectos aprobados para quedar en el olvido.