El Informe Anual de Actividad 2018 de la Cruz Roja explica a grandes rasgos los retos a los que se ha enfrentado la organización humanitaria el año pasado. Han casi duplicado las plazas de acogida de migrantes, hasta llegar a las 2.321 camas en todo el Estado. En total se han asistido a 53.687 personas migrantes en 1.384 intervenciones.
«Nuestro país, por su situación geográfica, es una de las mayores vías de entrada, una puerta a la esperanza», dice el texto del Informe. Cruz Roja cuenta con un dispositivo para la atención de quienes llegan, reforzando también otros puntos del territorio que han recibido migrantes como Valencia o Barcelona.
Asimismo, cuentan con un “programa de acogida a personas solicitantes de protección internacional”. Este cubre desde la primera acogida hasta la fase de autonomía, con una duración de 18 a 24 meses. Desde la organización no se atreven a hacer un cálculo de las personas que pueden llegar a las costas andaluzas este 2019, visto que el año anterior se triplicaron las llegadas en pateras.