En el último año ha realizado más de 14.000 intervenciones para la toma de conciencia de esta problemática y el empoderamiento de hombres y mujeres mayores
Cuando decimos “déjame hacerlo a mí, tu ya no sabes hacer nada”, “es mejor que no vayas, con tu edad mejor quédate en casa”, “no gastes en tonterías, tu ya no necesitas nada nuevo”, “haces el ridículo echándote un novio a tu edad”, o “papá, mamá, tu ocúpate de esto que no tienes nada mejor que hacer” a una persona mayor estamos subestimando sus capacidades, y eso, ‘aunque no lo sepas, también es maltrato’, y así de tajante lo afirma Cruz Roja en el Día Mundial de la toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez (15 de junio).
Además de lanzar una campaña para concienciar al respecto, la Organización Humanitaria recuerda que este último año ha realizado más de 14.000 intervenciones de este ámbito, desde 196 puntos de atención repartidos en todo el territorio, ya que Cruz Roja trabaja todo el año con su proyecto ‘Buen trato’ precisamente para promocionar un trato adecuado a las personas mayores y proteger frente al maltrato, salvaguardando sus derechos, y apoyando a quienes sufren o podrían sufrir cualquier tipo de malos tratos.
Cruz Roja interviene con hombres y mujeres mayores de manera directa, y con el conjunto de la sociedad, para cambiar actitudes y conductas edadistas por un contexto favorable al desarrollo de su potencial y su calidad de vida. Más de 5.000 personas (1.122 hombres y 3.963 mujeres) han participado en estas actuaciones en 2022 en la que se ha contado también con aliados naturales del proyecto, como los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado o el IMSERSO, que han aportado información de manera directa sobre los aspectos a tener en cuenta para evitar el maltrato, y también sobre cómo reportarlo si fuera necesario.
En el marco de la conmemoración del 15 de junio, Cruz Roja quiere recordar que las personas mayores son de especial relevancia para la sociedad, que aportan experiencia, sabiduría, visión histórica, y son pilar y nexo de unión de muchas familias. A pesar de ello, son objeto de discriminación, abuso y maltrato por el hecho de ser mayores, y según la Organización Mundial de la Salud, 1 de cada 6 personas sufren algún tipo de maltrato asociado a la edad, por lo que es un problema de primera magnitud en la sociedad.
El maltrato no sólo abarca la agresión física, sino que va desde la negligencia u omisión de los cuidados que pueden sufrir tanto por su entorno como por profesionales, hasta el abandono, o la creación de una imagen peyorativa que socialmente se ofrece en ocasiones de este colectivo, fruto del edadismo, las trabas en la participación social, o el infantilismo, entre otros.
Cruz Roja señala esta problemática invisibilizada para que se actúe de manera intensa en erradicarla, y concienciar sobre que quien lo sufre, también sufre vergüenza por no tener recursos de apoyo, sienten que son vistos como generadores de costes sociales y sanitarios en lugar de personas activas de pleno derecho, y falta información sobre sus propios derechos y su defensa. Además, se requiere de mayor concienciación a los perpetradores, que incluso no son conscientes de que subestimando las capacidades de las personas mayores les están maltratando. Características como la edad avanzada, el sexo femenino, el aislamiento, la discapacidad o la situación de dependencia, pertenecer a una minoría étnica, racial o religiosa, estas en situación de privación de libertad entre otros, son factores de riesgo muy importantes para sufrir maltrato.
Desde 2016, Cruz Roja realiza actividades dirigidas a mejorar la información y toma de conciencia de la importancia del problema por parte de las propias personas mayores, su promoción y participación de en su proceso de mejora a través de grupos de ayuda mutua o la creación de contenidos y la mejora de las competencias necesarias para prevenir o superar las consecuencias una posible situación de abuso, negligencia o maltrato. Lo hacen posible más de 700 personas voluntarias, formadas, motivadas y organizadas para ello.