Ante todo y principalmente desde Contigo Somos Democracia queremos dar nuestro más sentido pésame a la familia del vigilante de seguridad que ha fallecido a los 50 años de edad a causa del coronavirus y que prestaba sus servicios en un SUAP de Ceuta.
No podemos olvidar al colectivo de la seguridad privada, ni a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, tampoco a la Policía Local en estos momentos de pandemia ya que son todos ellos un cortafuegos que luchan en primera línea. Sin embargo, da la sensación de que a estos profesionales se les tiene relegados a un segundo plano y que su gran labor no está tan reconocida o valorada por la clase política.
Los políticos se han deshumanizado, están carentes de buenas intenciones y solo piensan en sí mismos y así ha quedado reflejado. Se creen más importantes que los ya mencionados y que el ciudadano de a pie; mientras siguen muriendo a diario muchas personas que no han llegado a tiempo a su vacuna, ellos han dado una clase magistral de egoísmo, se han puesto el mundo por montera y entrando por la puerta trasera a hurtadillas, se han hecho con sus dosis de vacunación.
Para ellos las personas no son esenciales, solo son cifras y números. ¿Ellos piensan que sí lo son? Está claro que se creen esenciales y por ende imprescindibles y están muy equivocados; sí es cierto que Ceuta necesita políticos, pero deben ser honrados y con vocación de servicio al ciudadano, haciendo un enorme favor si el resto desaparece ya que son muchos los circos mediáticos a los que últimamente nos tienen acostumbrados.
Desde Contigo Somos Democracia, José Antonio Carbonell responsable territorial condena este tipo de actos que solo reiteran que el cargo que muchos ostentan es un trampolín para saltar por encima de todos los ciudadanos. En una democracia no podemos permitir que los políticos utilicen sus privilegios para poder llevar todo tipo de acciones que solo buscan el beneficio de ellos mismos o del partido al que pertenecen.
En estos momentos con tanta desazón e incertidumbre por los que atraviesa nuestra ciudad, deberían ser motivos más que suficientes para demostrarle al pueblo, ese que nos confía su voto, que nosotros nos adaptamos a las nuevas circunstancias para llegar a ser esos políticos que los ceutíes necesitan para sacarlos de las adversidades que están sufriendo.