CSIF exige partidas presupuestarias concretas para reforzar la prevención: hay que mejorar la calidad del aire en las aulas frente al Covid-19
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, advierte de que el Gobierno no se puede amparar en la pandemia para imponer normas educativas sin el debate previo con los sindicatos y resto de la comunidad educativa, como en el caso del decreto para facilitar aprobados y títulos en Bachillerato y la ESO con suspensos.
El pleno del Consejo Escolar del Estado aprobará mañana, previsiblemente, uninforme (“Estudio comparado. El éxito en la educación primaria y secundaria”) que ensus conclusiones propone repetir asignaturas suspensas en vez de un curso completo, evitando así que el alumnado tenga que volver a cursar materias que ya han superado.
El informe, redactado por técnicos del Consejo Escolar a instancias del presidente de este órgano consultivo, dicta una serie de recomendaciones dirigidas a disminuir la repetición, fijándose en el ejemplo de otros países donde la promoción es prácticamente automática, aunque de manera sesgada porque obvian cuestiones clave como la inversión educativa, las ratios y los refuerzos en esos mismos países.
En opinión de CSIF, este informe ha sido ‘teledirigido’ por el Ministerio para avalar sus reformas. De hecho, concluye que “estas medidas irían encaminadas a hacerposible que la repetición sólo fuera realmente un recurso excepcional”.
CSIF recuerda que esta medida ya existía en los 90 con la LOGSE y fue derogada por otro Gobierno socialista, con el ministro Gabilondo por el fracaso que supuso. Consideramos que esta medida es inviable con las actuales ratios de alumnos y la falta de recursos materiales y humanos. En estas condiciones, el personal docente carece de medios adecuados para realizar una atención individualizada del alumno.
Esta medida supondría, además, una continuación al decreto que ya permite a las comunidades otorgar el título de ESO y Bachillerato sin límite de suspensos. Para CSIF, esta norma vulnera el principio de igualdad de oportunidades, ya que los criterios de evaluación en educación primaria, ESO y Bachillerato podrán ser modificados por las administraciones educativas y centros docentes, por lo que se dará un trato diferente al alumnado en función de la comunidad donde estudie.
CSIF se opondrá mañana a la publicación de este estudio y defenderá enmiendas al Informe 2020 sobre el Estado del Sistema Educativo. Desde el sindicato, instamos alMinisterio de Educación y Formación Profesional a que “cumpla siempre sus obligaciones” y asegure que todas las normas educativas tengan el dictamen previo del Consejo Escolar.
Reclamamos un Pacto de Estado por la Educación que defina en una Ley Orgánicalas competencias de cada una de las Administraciones y que el Estado sea “garante”de la igualdad entre el alumnado en una educación de calidad.
Igualmente, abogamos por un refuerzo educativo y por más apoyo al alumnado en vez de rebajar el nivel de exigencia para aprobar. Seguimos avisando al Gobierno: los centros necesitan más recursos; faltan medios de protección, las ratios continúan muy por encima de los 20 alumnos por clase que había recomendado el Ministerio de Sanidad y no se cubren con la prontitud adecuada las sustituciones que se van produciendo.
Además, advertimos de que los centros carecen de personal suficiente y de que hay que incrementar en 43.000 docentes las actuales plantillas de los centros públicos. Para ello, el Ministerio y las CCAA deben impulsar amplias ofertas de empleo público en tres años.
En cuanto a las medidas concretas frente a la crisis sanitaria, CSIF reclama partidas presupuestarias para actualizar los equipos informáticos, instalar Internet de alta velocidad y mejorar la calidad del aire en las aulas, entre otras.
Exigimos planes de reforma en los centros para adecuarlos a las normas sobre climatización, eficiencia energética y renovación del aire. La crisis sanitaria ha mostrado que la realidad es que no cuentan con equipos de ventilación adecuados y que con la llegada del invierno tienen que elegir entre la idoneidad térmica o una ventilación saludable.