SAMU es la empresa encargada de las gestión de los menores llegados recientemente a Ceuta. Desde CSIF denuncian las condiciones que esta empresa da a sus trabajadores. El sindicato afirma que se llevan a cabo jornadas de hasta 38 horas, que las instalaciones para trabajar no son adecuadas y que los salarios son «desproporcionalmente bajos» además de la «sobrecualificación» del personal que presta sus servicios en categorías más bajas de las que corresponden. Por ello, exigen al Gobierno que tome «medidas contundentes» para garantizar la sostenibilidad de la empresa y mejorar la atención a los menores y las condiciones de los trabajadores
La Fundación SAMU es la encargada de la gestión de los más de 1.000 menores que han llegado a nuestra ciudad desde el pasado 17 de mayo. Desde el sindicato CSIF han denunciado que esta responsabilidad se ha contratado con la citada empresa «con un simple movimiento, por urgencia y sin supervisar adecuadamente las condiciones en las que cedían esta gestión».
El sindicato critica que los contratos realizados por SAMU conllevan salarios desproporcionadamente bajos, no acordes a las tareas propias de un servicio de atención a menores. «Se contrata a personal sobrecualificado, Educadores Sociales, Trabajadores Sociales, etc. en las categorías más bajas de la empresa para aprovecharse de su vocación y celo profesional para de este modo ahorrar costes en personal», señalan.
Otra de las características de la empresa que CSIF ha denunciado son las jornadas laborales que han llegado a calificar «de explotación«. Se está trabajando, según la central sindical, «con horarios de 10, 12 y hasta 38 horas de jornada continuada, algo insostenible en pleno siglo XXI y menos en un servicio de estas características en el que es imprescindible mantener la vigilia, la atención y la concentración, hemos de recordar a SAMU que el trabajo con menores requiere de una especial atención por parte de los profesionales, que de difícil forma podrán mantener su rendimiento si realizan turnos de 38 horas seguidas (desde el sábado a las 8:00 hasta el domingo a las 22:00)».
Además, afirman que, «por si esto no fuera suficiente, se mantienen estas jornadas en instalaciones que de ninguna manera reúnen las condiciones mínimas necesarias para un servicio de estas características, no estando dotados de estancias adecuadas para el personal, que, valga como ejemplo, en el caso de una de las naves del tarajal no cuentan ni con aseos para el personal».
Por ello desde CSIF exigen al Gobierno de la Ciudad, garante de la ejecución de este servicio y al propio SAMU, responsable de los menores a los que atiende, que tome medidas contundentes y urgentes para garantizar la sostenibilidad de la atención a estos menores sin mermar los derechos laborales de los trabajadores.