Reclaman que se adapten las medidas preventivas contra el covid-19 a las recomendaciones del Consejo Superior de Investigaciones Científica y denuncian que los centros escolares siguen sin estar preparados para el invierno: la bajada
de temperaturas complica la ventilación
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas y con presencia creciente en el sector privado, ha instado al Ministerio de Educación y Formación Profesional, a las CCAA y a los ayuntamientos a que instalen filtros HEPA o dispositivos de purificación de aire portátiles en las aulas, como medida preventiva adicional a la ventilación natural y al uso de las mascarillas ante la llegada del frío.
Para el sindicato, es fundamental mejorar la calidad del aire en las aulas, que son espacios cerrados, y hay que adaptar las medidas a las nuevas evidencias científicas para prevenir los contagios por vía aérea. Las tareas de mantenimiento de los centros corresponden a ayuntamientos y a comunidades autónomas.
Por eso, CSIF, en el marco de la supervisión y el seguimiento que realiza de las medidas preventivas anti Covid-19 en los centros educativos y ante la esperada bajada de las temperaturas, se ha dirigido por escrito al Ministerio, a las consejerías del ramo, a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y a los ayuntamientos de todo el país para reclamar que se revisen los protocolos de ventilación en las aulas.
Reclamamos, además, que se adapten estos protocolos a las nuevas recomendaciones del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), ante las evidencias científicas sobre el contagio por aerosoles y el mayor riesgo de
propagación del Sars CoV2 en espacios cerrados.
El CSIC, en una guía sobre la ventilación en las aulas para reducir el riesgo de contagio establece las recomendaciones para que la ventilación y la purificación del aire sea eficaz. Entre sus propuestas, indica que si no se puede recurrir a ninguna medida de ventilación, se debe purificar el aire con equipos provistos de filtros HEPA.
En este sentido, CSIF solicita alternativas para la purificación del aire de las aulas, bien sea a través de filtros HEPA o cualquier otra medida que evite dar clases en condiciones indeseadas debido al frío.
Estos dispositivos, que deben cumplir con la homologación europea, supondrían una inversión relativamente pequeña, según los estudios realizados por CSIF, ya que para un espacio de 45 metros cuadrados se requeriría un dispositivo con capacidad para 12,5 litros por segundo y ocupante, lo que supone un coste que oscila entre los 100 y los 120 euros.
El funcionamiento de dichos aparatos podría alternarse con la ventilación natural del espacio, con lo que incluso podrían compartirse para varias aulas durante la jornada lectiva.