Cuba ha completado la reconexión de su sistema eléctrico nacional después de un apagón total que afectó a toda la isla el pasado viernes. La compañía estatal Unión Eléctrica (UNE) anunció este martes que el proceso de recuperación ha sido exitoso, aunque advierte que la estabilidad del suministro eléctrico aún no está garantizada.
El director general de Electricidad del Ministerio de Energía y Minas, Lázaro Guerra, explicó que, aunque la conexión se ha restablecido, la capacidad de generación sigue siendo insuficiente para satisfacer la demanda actual. Esto significa que los apagones podrían continuar mientras la UNE gestiona las cargas eléctricas.
Las disparidades en la reconexión son notables en diferentes regiones del país. Mientras que en La Habana la reconexión ha alcanzado casi el 100%, en otras provincias como Santiago de Cuba, Matanzas y Cienfuegos, el porcentaje varía entre el 40% y el 60%.
El apagón fue provocado por una avería en la central termoeléctrica Antonio Guiteras, ubicada en Matanzas. El proceso de recuperación implicó la creación de subsistemas que se interconectaron gradualmente, junto con el encendido y sincronización de unidades generadoras.
Además de los problemas energéticos, Cuba enfrenta las consecuencias de la tormenta tropical Óscar, que recientemente azotó la isla. Al menos siete personas han perdido la vida en el extremo oriental del país debido a este fenómeno climático.
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, expresó sus condolencias a las familias afectadas y aseguró que el gobierno está trabajando en la evaluación de daños y en la planificación de acciones de recuperación. Las autoridades han reportado más de 1.000 viviendas dañadas, así como pérdidas en infraestructuras estatales y en el sector agrícola.
Óscar entró en Cuba como un huracán de categoría 1, trayendo consigo fuertes vientos y lluvias intensas. Este evento recuerda al huracán Irma de 2017, que también causó estragos en la isla.
La combinación de desafíos energéticos y climáticos subraya la vulnerabilidad de Cuba ante fenómenos naturales y problemas estructurales en su sistema eléctrico. La recuperación completa y la estabilización del suministro eléctrico serán cruciales para mitigar el descontento social y apoyar la economía del país.