Los trabajadores y trabajadoras del catering del CETI siguen teniendo problemas para cobrar sus nóminas y para prestar el servicio para el que han sido contratados/as. Ya han denunciado en más de una ocasión la escasez de alimentos y como tienen que ingeniárselas para poder ofrecer comidas, aunque no cumplan con lo estipulado en los menús. Salvadora Mateos, delegada del Gobierno, advirtió en su momento que la empresa había recibido un ultimátum y que de no ponerse al día podría ver rescindido el contrato. Hoy sin embargo, ha cambiado esta versión y ha explicado que no puede asegurar la rescisión del contrato con Dulcinea S.A.
El pasado 22 de julio, la delegada del Gobierno, Salvadora Mateos aseguró ante los medios que si Dulcinea S.A., empresa que gestiona el catering del Centro de Estancia Temporal para Inmigrantes (CETI), había recibido un «ultimátum» por parte del Gobierno para ponerse al día con sus trabajadores/as y con el servicio que debe prestar en el centro y que, en caso de no hacerlo, se lo podría revocar el contrato. Sin embargo, hoy Mateos se ha mostrado más cautelosa y ha explicado que el Gobierno está tomando cuenta de que todos los problemas que hay en torno al catering del CETI y que tomará las medidas oportunas, pero advierte que no puede «decir
«Es una empresa que licitó en mayo y no está cumpliendo. El Gobierno está tomando medidas de todo lo que está pasando en Ceuta. Pero no puedo decir que se va a rescindir el contrato puesto que es una empresa que acaba de licitar. Sí puedo decir que se aplicarán medidas para que cumpla y esperemos que así sea» ha señalado la delegada del Gobierno.