La Comunidad Valenciana sigue sumida en la búsqueda de desaparecidos tras el paso de la DANA que azotó la región hace más de una semana. Entre los afectados se encuentra Susana Vidal, quien busca a su marido e hija, José Javier Vicent y Susana Vicent, desaparecidos desde el martes pasado.
En un emotivo llamamiento en el programa La Hora de La 1, Susana compartió su angustia: «Lo último que sé de mi marido es un WhatsApp que me envió a las 18:00 h diciendo que pasaba mucha agua por delante de la casa». Su hogar, ubicado en una zona rural cerca del río, ha quedado aislado por el barro y el agua.
Los esfuerzos de rescate han sido intensos, con la participación de la Policía Local, la UME y drones, pero Susana insiste en que se necesita más maquinaria pesada para remover el terreno y buscar bajo los escombros. «Pido si hay máquinas, orugas. Algo que pudiera entrar ahí para levantar, remover y buscar», imploró.
La comunidad ha mostrado un gran apoyo, con voluntarios y profesionales trabajando incansablemente. Sin embargo, Susana recalca que «no es suficiente» y ruega: «No se olviden de nosotros, por favor».
Otro caso desgarrador es el de Toñi, vecina de Massanassa, quien busca a su cuñado, Roberto Grau Gómez. El día de su desaparición, la policía alertó a los vecinos sobre el peligro inminente del agua. Roberto bajó a mover su coche y no volvió a subir. «Si no hubiese bajado, ahora estaría aquí», lamenta Toñi.
La situación ha movilizado a la comunidad y a las autoridades. Se ha habilitado un teléfono de atención a las familias y una oficina de desaparecidos en Albal para canalizar información y denuncias. La Guardia Civil y otras organizaciones trabajan sin descanso para localizar a los desaparecidos.
La tragedia ha dejado una huella profunda en la región, pero también ha mostrado la resiliencia y solidaridad de la comunidad valenciana. Mientras continúan los esfuerzos de búsqueda, las familias afectadas mantienen la esperanza de reunirse con sus seres queridos.