Hoy se conmemora el Día Internacional de la Persona Refugiada. Se calcula que 70,8 millones de personas en todo el mundo se han visto obligadas a huir de sus hogares. Ceuta, pese a ser ruta migratoria, sigue sin contar con una oficina de asilo en la Frontera
Según datos de la Organización de Naciones Unidas, en torno a 70,8 millones de personas se han visto obligadas a huir de sus hogares como resultado de los conflictos y la persecución, esto equivale a una persona cada dos segundos. Entre ellas hay casi 25,9 millones de personas refugiadas, más de la mitad menores de 18 años. Además, se estima que hay 10 millones de personas apátridas a quienes se les ha negado una nacionalidad y acceso a derechos básicos como educación, salud, empleo y libertad de movimiento.
«Es necesario un refuerzo del sistema de asilo»
La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) en su Informe Anual La situación de las personas refugiadas en España y Europa manifiesta los preocupantes desajustes del sistema nacional de asilo y las dificultades de acceso al mismo. Las más de 46.000 solicitudes de asilo presentadas en los primeros 5 meses de este año, según datos de Interior, y los más de 100.000 expedientes acumulados en los últimos años pendientes de resolución suponen «la prueba más evidente de que es necesario un refuerzo firme y urgente del sistema de asilo para dar respuestas estables a la realidad que se vive en nuestro país, que se encuentra entre los primeros de Europa en número de solicitudes». Además, señalan que en 2018 solo se aceptaron 1 de cada 4 solicitudes de asilo, muy por debajo de la media europea (38%) y se mantuvieron largos periodos de espera para formalizar las mismas, lo que en algunas provincias supone más de un año.
En 2018 España batió su máximo histórico con 54.065 solicitudes de asilo y se situó en un inédito cuarto lugar en el conjunto de la UE. Fue, además, el principal país de llegadas por vía marítima, con 58.569, el 51% del total. Pero apenas 575 personas obtuvieron el estatuto de persona refugiada y 2.320 la protección subsidiaria.
El acceso al sistema de asilo enfrenta una grave situación, con largas esperas para formalizar las solicitudes y cerca de ochenta mil expedientes pendientes de resolución a fines de 2018, una cifra que ya ascendía a 93.140 en febrero de 2019. A pesar del refuerzo de los recursos puestos para la atención humanitaria a las personas llegadas por vía marítima y para la acogida e integración, el número de llegadas desbordó las previsiones y faltaron medios para atender a las personas migrantes y solicitantes de asilo.
En 2018, el Mediterráneo volvió a ser la ruta migratoria más peligrosa del planeta. Sin embargo, la respuesta de la mayor parte de los países de la UE fue criminalizar la labor solidaria de salvamento que realizan los barcos de las ONG. Europa cerró aún más sus fronteras a las personas refugiadas y el largo y complejo proceso de construcción de un sistema común de asilo permanece estancado.
Ceuta y la oficina de asilo en frontera que no funciona
En 2018, hubo 6.494 solicitudes de protección internacional formalizadas en un puesto fronterizo, es decir, en aeropuertos, puertos y en las oficinas de frontera terrestre de Ceuta y Melilla, según las estadísticas del Ministerio del Interior. El informe apunta que «en 2018, tampoco hubo ninguna solicitud de protección internacional en el puesto fronterizo de Ceuta, como sucede desde la apertura de aquella oficina de asilo. Por el contrario, la del puesto fronterizo terrestre de Melilla recibió 2.800 solicitudes, principalmente de personas procedentes de Siria, Palestina y Yemen».
Pese a no tener oficina de asilo en frontera, en 2018, 348 personas consiguieron solicitar protección internacional en nuestra ciudad. Sin embargo, un año más, las personas que pidieron asilo en las ciudades autónomas, «vieron limitada su libertad de movimientos debido a la inclusión en el documento que les acredita como solicitantes de asilo de la frase ‘Válido solo en Ceuta/Melilla’ » denuncian desde la entidad.
El Servicio Jurídico de CEAR siguió recurriendo esta limitación y logró nuevos pronunciamientos del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía y del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que reconocieron la libertad de circulación por todo el territorio español a las personas solicitantes de protección internacional y señalaron que la negación de su traslado a la Península supone una vulneración de sus derechos fundamentales.
Said, una víctima del «Válida solo en Ceuta»
Dentro del Informe de CEAR, se recoge la historia de Said, una de las personas que vio vulnerados sus derechos. Said solicitó protección internacional en Ceuta a finales de 2017 a consecuencia de la persecución sufrida en Marruecos debido a su orientación sexual.
Ante el tránsito diario de personas marroquíes hacia Ceuta y la población acogida en el CETI, Said no se sentía seguro en esta ciudad y cuando intentó cruzar en kayak a la Península fue rescatado por Salvamento Marítimo. El informe explica que «necesitó atención psicológica continuada por el estado de ansiedad y tristeza que le había originado estar sometido a vejaciones y humillaciones continuas en esta ciudad, donde permanecía confinado por la inscripción en su tarjeta de solicitante de protección internacional del término: “Válida solo en Ceuta”».
El Servicio Jurídico de CEAR interpuso un recurso de alzada contra esta inscripción, sin obtener respuesta, por lo que recurrió ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid y solicitó como medida cautelar su traslado a la Península. En octubre de 2018, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid estimó esta medida y Said, casi un año después de llegar a Ceuta, pudo instalarse en la Península e iniciar una vida en condiciones de seguridad.
Las «devoluciones exprés» criticadas en el Informe
Paloma Favieres, directora de Políticas y Campañas de CEAR, ha denunciado que España continúe realizando las llamadas “devoluciones en caliente” en Ceuta y Melilla, condenadas por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos y sobre las que la Gran Sala del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) se pronunciará próximamente. Además, por primera vez el 23 de agosto de 2018 la Policía Nacional de Ceuta devolvió a Marruecos a 116 personas subsaharianas que habían saltado la valla el día anterior en aplicación del Acuerdo Bilateral de Readmisión España-Marruecos de 1992, asegurando que se había realizado de manera individual, con asistencia letrada y de intérprete.
Sin embargo, denuncia CEAR, «este procedimiento acelerado impide detectar personas en situación de vulnerabilidad o con necesidad de protección internacional, como constató el Defensor del Pueblo y subrayó CEAR».
«40 años de refugio»
Tras la presentación del Informe, CEAR estrenó el documental “40 años de refugio”, dirigido por Silvia Venegas, y que, a través de diferentes voces realiza un recorrido por estas cuatro décadas del asilo en España y de la labor de la entidad y su papel a la hora de tratar de convertir a nuestro país en tierra de asilo.