«Vamos a intentar solucionar caso por caso, pero hay que tener en cuenta que se habilitaron corredores humanitarios y la solución que adoptemos tampoco puede ser en detrimento de las personas que en ese momento decidieron lícitamente poder retornar a su país», ha señalado Javier Jesús Perea, que añade que cualquier solución que no puede generar «agravio comparativo»
El secretario de Estado de Migraciones, Javier Jesús Perea, se ha reunido esta mañana con la portavoz del colectivo de trabajadores y trabajadoras transfronterizas, Rachida Jraifi, para conocer de primera mano la problemática de estas personas que llevan atrapadas en Ceuta casi dos años e intentar abordar la cuestión desde el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
La semana pasada, el Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, en una carta remitida a Rachida Jraifi, le indicaba que había puesto en conocimiento de la Dirección General de Migraciones la situación de los trabajadores y trabajadoras transfronterizas e informaba de que ya se encuentran en trámite distintas actuaciones en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla «al objeto de que puedan prorrogar su autorización de trabajo, así como facilitar dicha prórroga sin exigir documentación marroquí imposible de obtener».
Por su parte, Perea confiesa que ha sido una reunión «cordial» en la que ha podido conocer la situación concreta y la casuística diferente a la que se encuentra cada persona de este colectivo de en torno a 200 personas. El secretario de Estado de Migraciones señala que lo que están haciendo tanto a nivel de las autoridades de Extranjería como de la propia Delegación del Gobierno es intentar articular algún tipo de mecanismo dentro de la vigencia del actual Reglamento de Extranjería.
«Vamos a intentar solucionar caso por caso todas las situaciones, pero teniendo en cuenta también que esto forma parte de un escenario mucho más amplio en el que entran en juego otro tipo de factores, y hay que tener en cuenta también que se habilitaron corredores humanitarios para poder salir de la ciudad autónoma y que la solución que tomemos tampoco puede ir en detrimento de las personas que en ese momento decidieron lícitamente poder retornar a su país«, ha señalado Perea, que aclarado que cualquier solución que tomen debe tener en cuenta las dos situaciones, tanto de las personas que regresaron como las que se han quedado, «para no generar agravio comparativo».
Por su parte, Rachida se ha mostrado contenta tras la reunión «porque nos han escuchado y nos han dicho que van a estudiar nuestro caso«. Sin embargo, aunque le han prometido que pronto recibirán noticias, no le han dado ninguna fecha para salir del «limbo» en el que se encuentran desde hace casi dos años. «Estamos muy agradecidos con la atención recibida, después de tanto sufrir, de tanto luchar y concentrarnos, ver estos resultados te da alegría, aunque todavía no hemos escuchado ninguna solución, pero es una luz al final del túnel», ha reconocido Rachida, que aclara que seguirán concentrándose hasta que no firmen la solución. «Sabemos que son leyes, y que tardan mucho en cambiarse, pero alguna reforma o beneficio, tenemos esperanza», ha finalizado.