Los planes incluyen la mejora de los accesos a las playas y la renovación del mobiliario urbano, que abarca desde la instalación de parques infantiles adaptados hasta la sustitución de sombrillas por otras de mayor tamaño. Además, las duchas para usuarios están siendo mejoradas para ofrecer un mejor servicio a los visitantes.
El Comité de Gestión de Playas de Ceuta ha intensificado sus esfuerzos para asegurarse de que todo esté listo para la temporada de baño que comienza oficialmente el 1 de junio. En una reciente reunión coordinada por la Consejería de Fomento, Medio Ambiente y Servicios Urbanos, junto con la empresa pública Obimasa, se han delineado una serie de medidas para mejorar la infraestructura y los servicios en las playas locales.
Alejandro Ramírez, consejero de la ciudad, presidió la reunión que tuvo lugar en el Salón de Plenos del Palacio de la Asamblea. Durante el encuentro, se discutieron detalladamente los preparativos para la temporada estival, incluyendo la supervisión de los proyectos de accesibilidad en las playas de Tarajal, Almadraba, Calamocarro, Ribera y Chorrillo. Algunos de estos proyectos ya están en marcha y otros están por comenzar.
Uno de los aspectos más destacados de los preparativos es el contrato de balizamiento y la instalación de redes antimedusas, que está en sus últimas etapas de adjudicación. Asimismo, se prevé utilizar drones diseñados específicamente para reducir la carga de polvo en las playas del Chorrillo y la Ribera, mejorando así la calidad del ambiente para los bañistas.
Por otro lado, la Consejería trabaja en un ambicioso proyecto de regeneración integral del litoral de la bahía sur. Este proyecto busca enfrentar los desafíos más importantes, como el aporte de arena y la creación de arrecifes y escolleras para mitigar los efectos de los temporales. Aunque este plan requiere una tramitación extensa y la obtención de varios permisos, subraya el compromiso de la administración con la sostenibilidad y la mejora continua de las instalaciones costeras.
El servicio de socorrismo y salvamento estará a cargo de Marsave, que empezará a operar desde el 1 de junio, mientras que otros servicios esenciales, como la Policía Local, se incorporarán de manera progresiva hasta estar completamente operativos el 15 de junio. Estas medidas garantizan que las playas no solo estén listas para los residentes y turistas, sino que también sean seguras y accesibles.
Adicionalmente, la ciudad continúa con su programa de monitoreo de la calidad del agua, llevando a cabo controles semanales que aseguran su excelente estado. Este año también se ha programado una nueva encuesta para recoger la opinión de los ciudadanos sobre los servicios de playa, lo que permite a la administración adaptar sus esfuerzos de acuerdo a las necesidades de los usuarios.