El estado de alarma no es una acción política como algunos han pretendido hacer ver. Responde a un momento de necesidad que ha exigido al Gobierno de España a tomar medidas excepcionales ante una pandemia tan grave como la del Covid-19, aunque parece que el Partido Popular no lo entiende o no lo quieren entender. Siguen obstinados en mantener una campaña de lucha absurda cuando en estos momentos lo que hace falta es la unidad de todos, tal y como han hecho los partidos de la oposición en otros países.
Habría que recordar que las reglas de la salud pública no tienen que ver ni con ideologías, ni con negocios. El estado de alarma es la herramienta para salvar vidas y sostener la economía bajo el principio fundamental del estado del bienestar, el de no dejar nadie atrás. El estado de alarma constituye un escudo de cara a la protección sanitaria, social y económica, y las medidas puestas en marcha por el gobierno de España están encaminadas, primero, a salvar vida, ya que salvando vidas salvamos además empresas y empleos. Si optáramos por priorizar el negocio sobre la salud, acabaríamos echando a perder la salud y también el negocio.
Ante la pandemia, el Gobierno de Pedro Sánchez ha respondido de manera rápida y eficaz, algo que ha quedado demostrado con las medidas sociales, económicas y laborales que han permitido que sean muchos los y las ceutíes que no se han quedado atrás en esta situación de crisis. Medidas, algunas, que se pueden considerar históricas. Jamás un gobierno en España había atendido a un colectivo tan esencial, en el caso de Ceuta aún más, como del los autónomos, aparte de abogar por los Ertes y no los Eres, como hicieron otros, ayudar al alquiler de la vivienda, al gasto social y otras muchas
Es evidente que tenemos que reanudar toda la actividad económica cuanto antes pero con una plena atención a la salud. Pero paralelamente tenemos que poner en marcha un plan de asistencia social, como ha pedido en varias ocasiones el PSOE de Ceuta al Gobierno de Juan Vivas.
Antes de la pandemia, en Ceuta ya eran muchas las familias que se encontraban en una situación de exclusión social y otras muchas vivían y viven bajo una economía muy frágil, fruto de unos ingresos muy exiguos derivados de la pérdida de poder adquisitivo de la mal gestionada crisis de 2008. En aquella ocasión fueron muchas las personas y familias de este país, y por ende de Ceuta, las que perdieron sus trabajos e incluso sus viviendas. No podemos permitir caer en los mismos errores ahora y que se produzca un incremento del número de familias en estado de vulnerabilidad, y eso solo se logra con la unidad de todos, apoyando las medidas del Gobierno de España y complementándolas, como en el caso de Ceuta, con otras por parte del Ejecutivo local, que tiene que jugar un papel muy importante en esta crisis.
A raíz de la crisis derivadas de esta pandemia se ha suscitado un gran debate en cuanto a la asistencia sanitaria y todos estamos de acuerdo en que es necesario reforzar nuestro sistema sanitario para poder afrontar, aún mejor, cualquier situación de crisis sobrevenida como la que estamos padeciendo. Pero también, y es por lo que abogamos los socialistas ceutíes, tenemos que reforzar la asistencia social para que nadie quede atrás, sobre todo los que peor lo están pasando, y que muchas familias ceutíes no se vean obligadas a tener que recurrir a las oenegés para conseguir alimentos, ayudas para el alquiler o para poder pagar los servicios básicos. Todos estamos obligados a crear unos derechos que protejan, valga la redundancia, estos derechos esenciales para los y las ceutíes en estado de vulnerabilidad. Hay que crear en Ceuta entre todos una economía social, que además de proteger derechos esenciales contemple incentivos, ventajas fiscales y ayudas para la creación de un tejido empresarial inclusivo; cooperativas y otras acciones emprendedoras.
Todo ello acompañado de medidas para ayudar al comercio y al tejido empresarial ceutí. Los socialistas ceutíes ya dejamos claro en el último pleno celebrado nuestro posicionamiento al respecto, apoyando la propuesta de modificación de créditos, aunque seguimos estamos en desacuerdo con que PP y Vox rechazarán la propuesta formulada por los sindicatos para ayudar a los trabajadores e insistimos en que hay que aumentar la partida para ayudas sociales.