Los conflictos bélicos sitúan a las mujeres en un punto extremo de vulnerabilidad. La violencia sexual contra mujeres y niñas se generaliza en el conflicto y hasta se utiliza como táctica de guerra. Además, las desplazadas tienen que enfrentarse a la desprotección, a la soledad y a las responsabilidades de los cuidados
«Las desigualdades de género se incrementan durante los conflictos«, así lo afirma Mireya Cidón, de Amnistía Internacional, que asegura que en el intento de huir de la guerra o de sus consecuencias, «muchas mujeres se convierten en desplazadas o refugiadas, a pesar de los peligros a los que se exponen, como el tráfico de personas y la trata con fines de explotación sexual. Los conflictos las separan de sus maridos, hijos y familiares, las dejan solas y en el exilio, y las obligan a afrontar en solitario todas las responsabilidades y el cuidado».
Los últimos datos del portal operacional de ACNUR reflejan que ya han salido de Ucrania 2.504.893 personas, de las cuales han llegado a Polonia a día de hoy, 12 de marzo, 1.524.903, en su gran mayoría mujeres y niños, ya que los hombres de entre 16 y 60 años tienen prohibido salir del país. En Ucrania, la ONU calcula que hay al menos 1,85 millones de desplazados internos y otros 12,65 millones de personas directamente afectadas por el conflicto.
El Alto Comisionado de la ONU, Filippo Grandi, afirmaba este jueves, 10 de marzo, que tras su visita a las fronteras vio un éxodo de personas, en su mayoría mujeres y niños, junto con refugiados mayores y personas con discapacidad, «llegaron conmocionadas y profundamente impactadas por la violencia y sus difíciles viajes hacia la seguridad. Hay familias que han quedado destrozadas sin razón. Trágicamente, a menos que la guerra se detenga, lo mismo ocurrirá con muchas más». Por su parte, la directora Ejecutiva de ONU Mujeres, Sima Bahous, se mostraba preocupada por la situación de las mujeres y señalaba que «la situación actual pone en peligro la seguridad de todos los ucranianos y hace que las mujeres y las niñas, en particular, corran un mayor riesgo de sufrir violencia sexual y de género, especialmente las refugiadas o desplazadas de sus hogares».
El impacto del conflicto en las mujeres
Cristina Muñoz, directora de Alianza por la Solidaridad-ActionAid España, una organización que lleva décadas trabajando con mujeres refugiadas en todo el mundo, ha manifestado su solidaridad con la población de Ucrania y con todas las personas forzadas a huir de la violencia y ha subrayado que, como organización feminista, les preocupa «bastante» el impacto que el conflicto tendrá en mujeres que se enfrentan a un mayor riesgo de sufrir violencia, incluida violencia sexual, en medio de las duras condiciones del desplazamiento que está viviendo toda la población.
Y es que, tal y como se puede comprobar a pie de frontera, la invasión rusa en Ucrania se ha convertido en el éxodo de las mujeres, que cargan con sus hijos e hijas a cuestas, tiran de las maletas y empujan las sillas de ruedas de sus mayores, para ponerse, y poner a salvo a sus hijos e hijas.
En sus caras la desolación. Dejan atrás la mitad de su vida, a sus maridos y a sus hijos varones mayores de 16 años; y además, se ven expuestas a la violencia sexual y a las redes de trata, que acechan en cada rincón de la frontera. Disfrazados de ayuda humanitaria se ofrecen a llevar a mujeres jóvenes, que estén solas o acompañadas de hijas menores, a cualquier sitio de Polonia o Europa; cuando en realidad lo que pretenden es introducirlas en el mercado de la trata.
Así lo han denunciado varias voluntarias con las que El Foro de Ceuta ha podido hablar estos días. Llanos García, de la Fundación Juntos Por la Vida, advierte a las mujeres refugiadas que se acercan a su stand, que no se suban a ningún coche de ninguna persona extraña.
De la misma manera lo denuncia Cristina Muñoz, que recuerda que en situaciones de guerra «a las zonas de desplazamiento llegan muchas personas voluntarias de buena fe, aunque sin experiencia, y también mucha otra gente sin ningún control, lo que puede ocultar otra realidad muy preocupante: la aparición en escena de redes de tráfico de mujeres que se aprovechan de la situación de desamparo en la que éstas llegan, solas y sin recursos, para enfrentarse a una nueva vida”.
Desde Alianza-Action Aid han denunciado en reiteradas ocasiones que las millones de mujeres desplazadas y afectadas por conflictos armados en varios países se encuentran en riesgo de sufrir violencia sexual, y es que, la guerra de Ucrania ha visibilizado, estas últimas semanas, la situación de las mujeres en caso de un conflicto armado, «la agresión de Rusia a este país del este de Europa ha supuesto el desplazamiento en pocos días de más de un millón y medio de mujeres y sus hijos e hijas. Este conflicto las ha convertido en las únicas responsables de las familias fuera de lo que ha sido su hogar y su entorno. Otras muchas, permanecen en su mayoría ocultas en sótanos dentro del país. Como ellas, millones de mujeres viven hoy, 8 de marzo, huidas o en riesgo de sufrir violencia en conflictos por todo el mundo», lamentan desde la organización.
“Son ucranianas, pero también afganas, sirias, malienses, palestinas o colombianas, entre otras muchas” declara Cristina Muñoz.