Tras el reciente triunfo judicial que llevó al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) a anular los acuerdos agrícolas y de pesca entre la UE y Marruecos, los letrados del Frente Polisario han puesto ahora su mirada en otro objetivo: abolir el acuerdo aéreo que permite la conexión de vuelos entre Europa y Marruecos, especialmente en lo que respecta a las rutas que incluyen al Sáhara Occidental.
El renovado interés en este acuerdo surge a raíz del anuncio de la aerolínea Ryanair, que ha comunicado su intención de abrir una nueva ruta entre Madrid y Dajla, una ciudad ubicada en el territorio disputado del Sáhara Occidental. Esta decisión ha reactivado la batalla jurídica del Polisario, que considera que estos vuelos vulneran la soberanía del pueblo saharaui.
En 2018, el TJUE ya emitió una ordenanza que declaraba que los acuerdos entre la UE y Marruecos no eran aplicables al Sáhara Occidental. El Frente Polisario sostiene que los vuelos internacionales que conectan con Dajla bajo el marco del acuerdo aéreo con Rabat ignoran el estatus especial de este territorio, reconocido por la comunidad internacional como sujeto a un proceso de descolonización.
Los abogados del Polisario argumentan que la expansión de las rutas aéreas a esta región es una violación de las resoluciones previas del TJUE y una forma de legitimar la ocupación marroquí del territorio. Por tanto, buscan que el tribunal europeo invalide también este acuerdo, lo que podría poner en riesgo las operaciones aéreas entre Europa y los territorios bajo administración marroquí.
La disputa legal promete intensificarse, especialmente ante la creciente presión del Frente Polisario por defender lo que considera sus derechos territoriales en el Sáhara Occidental, un conflicto que lleva décadas sin resolverse y que sigue siendo una fuente de tensiones diplomáticas en la región.