En una comparecencia pública, Alberto Gaitán, portavoz accidental del Gobierno de Ceuta, informó sobre los avances en el traslado de menores extranjeros no acompañados a otras comunidades autónomas. El proceso, que forma parte de un Plan de Contingencia aprobado en julio, tiene como objetivo reubicar a 87 menores. Gaitán destacó la complejidad del proceso y agradeció el apoyo de las comunidades receptoras, subrayando que se espera completar los traslados antes de que finalice agosto
En la rueda de prensa celebrada hoy, Alberto Gaitán, portavoz accidental del Gobierno de Ceuta, abordó la situación crítica que enfrenta la ciudad en relación con los menores extranjeros no acompañados (MENAs). Gaitán centró su intervención en el desarrollo del Plan de Contingencia, aprobado en julio de este año, que establece el traslado de 87 menores a diversas comunidades autónomas para aliviar la presión sobre los recursos de la ciudad.
Desde que comenzó la entrada masiva de menores en febrero, Ceuta ha estado trabajando para gestionar una situación que ha desbordado su capacidad de atención. Según explicó Gaitán, la Ciudad Autónoma elaboró una memoria migratoria para solicitar al Gobierno de la Nación y al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones un plan de respuesta integral, que finalmente se materializó en el Plan de Contingencia de julio. Este plan tiene como prioridad la redistribución de menores a otras regiones del país, pero el portavoz subrayó que no es un proceso inmediato ni sencillo.
«El traslado de menores no es automático», afirmó Gaitán. «Exige una documentación exhaustiva tanto por parte de la entidad pública de protección de Ceuta como por parte de la comunidad autónoma receptora». Este proceso burocrático implica un minucioso cruce de información y la verificación de los expedientes, lo que ha ralentizado los traslados. No obstante, el gobierno ceutí está en constante comunicación con las consejerías de las diferentes comunidades autónomas para acelerar la salida de los menores de la ciudad.
Hasta la fecha, unos 20 menores han sido reubicados en el marco del Plan de Contingencia. Gaitán expresó su confianza en que, antes de que finalice el mes de agosto, se logre trasladar a todos los menores previstos en el cupo inicial de 87. Sin embargo, reconoció que el proceso es complejo y que cada traslado debe ser gestionado con cuidado y responsabilidad, respetando tanto los derechos de los menores como las normativas de las comunidades autónomas receptoras.
El portavoz también aprovechó para destacar la solidaridad mostrada por diversas comunidades autónomas, como Navarra, cuya presidenta, María Chivite, expresó recientemente su disposición a colaborar con Ceuta en la reubicación de menores. Gaitán agradeció estos gestos de apoyo y señaló que la coordinación con el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha sido fundamental para llevar adelante el plan.
En respuesta a preguntas de los periodistas sobre si existe un «plan B» en caso de que no se complete la reubicación de todos los menores, Gaitán indicó que la estrategia principal sigue siendo la redistribución de los menores a otras comunidades autónomas. «El planteamiento es la salida de menores», aseguró, enfatizando que esta es la prioridad del gobierno ceutí en este momento. No obstante, reconoció que, en el peor de los casos, se podría contemplar un aumento de la capacidad de atención en la ciudad si la situación lo requiere.
El portavoz accidental insistió en que las gestiones para trasladar a los menores están avanzando a buen ritmo y se mostró optimista de que los traslados se completen lo antes posible. A pesar de las dificultades, expresó su esperanza en que el plan funcione según lo previsto, permitiendo a Ceuta aliviar una situación que ha puesto a prueba los recursos de la ciudad durante meses.
La comparecencia de Gaitán finalizó con un agradecimiento a todas las comunidades autónomas que han mostrado su disposición a ayudar, destacando que la solidaridad y la colaboración entre las diferentes regiones de España son clave para enfrentar el desafío migratorio que vive Ceuta.