La situación en los centros de acogida de menores no acompañados sigue siendo crítica, con una sobreocupación del 498%. El Gobierno ha anunciado que está trabajando en la reubicación de 100 menores en Andalucía y en la búsqueda de acuerdos con otras comunidades autónomas para aliviar la presión sobre el sistema
El Gobierno local ha informado sobre las medidas que está tomando para gestionar la crisis migratoria de menores no acompañados, una situación que se ha agravado en los últimos meses. Actualmente, los centros de acogida de la ciudad albergan a 526 menores, lo que representa una sobreocupación del 498%, en comparación con el año anterior, cuando la cifra total alcanzó los 600 menores.
Alejandro Ramírez, portavoz del Gobierno, ha señalado que se está trabajando en colaboración con la Junta de Andalucía para reubicar a 100 menores en dicha comunidad autónoma. La salida de estos menores está prevista en las próximas semanas, aunque aún no se ha fijado una fecha exacta. Este esfuerzo forma parte de un acuerdo mayor que busca distribuir a los menores en otras comunidades autónomas, con el objetivo de aliviar la saturación de los centros locales.
«El trabajo con Andalucía está muy avanzado, y esperamos que estos 100 menores puedan ser trasladados pronto. Además, seguimos explorando acuerdos con otras comunidades para gestionar esta crisis de manera más eficaz», declaró Ramírez.
En cuanto a la financiación necesaria para atender esta situación, el portavoz ha informado que se estima un gasto adicional de 10 millones de euros hasta finales de año, una cifra que depende de la evolución de las entradas de nuevos menores en los próximos meses. Esta cantidad se suma a los 5,2 millones de euros que ya se habían aprobado previamente como ayuda para la gestión ordinaria de los menores.
El Gobierno también se ha pronunciado sobre los intentos de llegada masiva de migrantes a la ciudad, como el que tuvo lugar el pasado domingo. Según Ramírez, las autoridades marroquíes han estado actuando de manera efectiva para contener estos intentos, aunque reconoció que la situación sigue siendo preocupante y está bajo constante monitoreo.
El portavoz concluyó señalando que la colaboración con el Gobierno central y con las autoridades de otras comunidades autónomas es clave para encontrar una solución a largo plazo, que permita dar una respuesta adecuada a la crisis de menores no acompañados que enfrenta la ciudad.