A través de un escueto comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores ha informado de que la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores, Cristina Gallach, ha convocado de urgencia a la embajadora de Marruecos en España. «La secretaria de Estado ha trasladado a la embajadora Benyaich que España espera de todos sus socios respeto a la soberanía e integridad territorial», explica el Ministerio
Este lunes, para sorpresa de algunos y hartazgo de otros, el primer ministro del Reino de Marruecos, Saadeddine El Othmani, declaraba que, al igual que el Sahara, las ciudades de Ceuta y Melilla son marroquíes. La reacción del Gobierno de España se ha hecho esperar hasta última hora de la noche y ha llegado a través de un escueto comunicado publicado en la web del Ministerio de Asuntos Exteriores:
«La secretaria de Estado de Asuntos Exteriores, Cristina Gallach, ha convocado hoy de urgencia a la embajadora de Marruecos en España. La secretaria de Estado ha trasladado a la embajadora Benyaich que España espera de todos sus socios respeto a la soberanía e integridad territorial de nuestro país y le ha pedido aclaraciones sobre las declaraciones del primer ministro de Marruecos, Saadeddine El Ohmani, sobre las ciudades de Ceuta y Melilla«.
Horas antes, el presidente del Partido Popular, Pablo Casado, reclamaba a Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, que respondiera «de inmediato» a las declaraciones de El Othmani. «Sánchez debe responder de inmediato a las declaraciones del primer ministro marroquí. La soberanía española de Ceuta y Melilla, y la integridad territorial nacional es irrenunciable. La división interna y la debilidad internacional del Gobierno PSOE-Podemos cuesta demasiado cara», publicaba Casado en sus redes sociales.
Estas palabras han sido respaldadas en Ceuta por el Partido Popular de Ceuta. Además, su secretaria general, Yolanda Bel, ha apuntado que «es una evidencia que Ceuta y Melilla son españolas. Pero es inaceptable que el Presidente del Gobierno guarde silencio ante las declaraciones del primer ministro marroquí. Señores dirigentes del país vecino, sobre la soberanía de Ceuta y Melilla no hay nada que hablar».