Un Hospital de Campaña
En marzo de 2020, cuando la pandemia de COVID-19 golpeó con fuerza, el Hotel Ilunion Alcora se convirtió en el primer hotel medicalizado de España. Manuel Jiménez, director del hotel, relata cómo cedieron sus instalaciones a la administración para atender a 89 ancianos infectados. Con 35,000 metros cuadrados, el hotel ofrecía el espacio necesario para crear una infraestructura hospitalaria adecuada.
El personal del SAMU (Servicios de Asistencia Médica de Urgencias) desempeñó un papel crucial, logrando hitos sanitarios significativos, como evitar contagios entre sus más de cien integrantes. Marcos Saa, jefe de mantenimiento del hotel, fue uno de los pocos empleados que continuó trabajando durante este periodo, apoyando al equipo médico en sus labores diarias.
Saa recuerda con emoción los momentos difíciles pero gratificantes, como ver a los pacientes recuperarse y recibir el alta. ‘Fue un momento penoso de vivir, pero también bonito’, comparte. La transformación del hotel dejó una huella imborrable en todos los involucrados.
Un Refugio de la Guerra
Con el estallido de la invasión rusa de Ucrania en 2022, el hotel volvió a abrir sus puertas, esta vez como refugio para cerca de un centenar de ucranianos desplazados. En colaboración con CEAR, el hotel no solo proporcionó alojamiento, sino también oportunidades laborales para algunos refugiados, integrándolos en su plantilla.
Carmen Ramos, gobernanta del hotel, trabajó de cerca con una de las refugiadas, destacando la conexión emocional que se formó. ‘Llegó su alegría’, comenta sobre la experiencia de trabajar con ellos. María José Ángeles, camarera en la zona de restauración, también recuerda con cariño a los refugiados, especialmente a los niños que se convirtieron en parte de la familia del hotel.
La barrera del idioma fue superada con paciencia y esfuerzo, creando un ambiente de convivencia y aprendizaje mutuo. ‘Ellos decían que su vida estaba ya aquí’, recuerda Ángeles, subrayando el deseo de los refugiados de integrarse y aprender el idioma.
El hotel también acogió brevemente a refugiados subsaharianos, aunque el contacto fue limitado debido al corto tiempo de estancia. Sin embargo, la experiencia fue igualmente significativa para todos los involucrados.
El Hotel Ilunion Alcora ha demostrado ser más que un simple lugar de alojamiento. Ha sido un pilar de apoyo en tiempos de crisis, ofreciendo no solo un techo, sino también esperanza y nuevas oportunidades para aquellos que lo han necesitado.