Con la incorporación de estas dos nuevas acreditaciones, el INGESA de Ceuta contará con cinco unidades docentes acreditadas para la formación sanitaria especializada. A las ya acreditadas de Unidad de Medicina Familiar y Comunitaria, Unidad de Matronas y la Unidad Multriprofesional de Salud Laboral, ahora se unen las especialidades de Medicina Interna y Medicina Preventiva.
El Hospital Universitario de Ceuta (HUCE) ha recibido, por parte del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, la acreditación para formar médicos en las especialidades de Medicina Interna y Medicina Preventiva. Esta acreditación reconoce su cualificación de acuerdo con requisitos relativos a recursos humanos y físicos, actividad asistencial, actividad docente e investigadora, para la formación de especialistas en Ciencias de la Salud. Esta acreditación permitirá que el Hospital Universitario de Ceuta pueda ofertar anualmente plazas de formación de MIR en estas especialidades, garantizando que estos residentes puedan adquirir todas las competencias previstas en el programa formativo de sus especialidades, al contar ambos servicios con los requisitos y estándares precisos.
Según indican desde Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA): «Esto supone un salto cualitativo en la formación de Médicos Internos Residentes». Además, el INGESA destaca también la «apuesta por la formación de residentes no solo para Ceuta, sino para el Sistema Nacional de Salud y para la Unión Europea, ya que con nuestro título pueden trabajar en cualquier lugar de España y de la UE».
Aprendizaje de los residentes en el Hospital Universitario de Ceuta
Por su parte, el jefe del Servicio de Medicina Preventiva y Salud Pública, Julián Domínguez, subraya que la formación de residentes en su Servicio se basa en tres pilares básicos que hacen de su área un gran lugar para aprender y llegar a ser un gran especialista:
- Aprendizaje y autonomía: “Se le brinda autonomía al residente pero siempre seguido para su valoración posterior”.
- El componente ético: “El médico debe formarse como un buen profesional y como una buena persona. Un buen profesional no podrá ser nunca una mala persona y viceversa. El componente ético de la formación especializada es una de las cosas que más intentamos potenciar en nuestro Servicio”.
- La especialidad y los tiempos de aprendizaje: “Formar a especialistas de nivel medio, pero que dominen todas las ramas de su especialidad. Un buen especialista no es completo hasta que no ha estado trabajando de 5 a 10 años como especialista”.