Este martes, la Audiencia Provincial de Madrid ha dado inicio al juicio contra la tuitera conocida como ‘Barbijaputa’, quien se enfrenta a cargos de delitos de odio contra la comunidad judía y trivialización del Holocausto. El fiscal ha solicitado una pena de un año y nueve meses de cárcel, así como la inhabilitación especial para el uso de redes sociales, y una multa de 11 meses con una cuota diaria de 9 euros.
La acusación se dirige contra M. P. B., quien utilizaba el perfil @Barbijaputa en la red social X (anteriormente Twitter) para publicar mensajes con claros tintes antisemitas desde 2011. En sus publicaciones, la acusada expresaba una intolerancia radical hacia las personas judías e incluso elogió a Adolf Hitler, la figura central del régimen nazi, lo que ha causado un gran malestar dentro de la comunidad judía.
Uno de los tuits clave que ha sido presentado como prueba fue publicado el 15 de noviembre de 2011, en el que ‘Barbijaputa’ escribió: «Hitler la cagó cargándose a los judíos, eso no sirve para nada. Ahora estaríamos mejor si hubieran perseguido, por ejemplo, a los felices». Este mensaje, que recibió al menos 23 retuits y 7 «me gusta», es solo uno de varios comentarios en los que la acusada trivializa el genocidio judío y hace comentarios despectivos sobre el colectivo.
Entre los tuits más controvertidos también se incluyen mensajes como: «Hitler era un cabrón por cargarse a los judíos y un cutre por no acabar el trabajo. Ahora mira lo que pasa», o «¿Qué sería más apropiado: eliminar todo Israel o solo a los judíos?», que según la Fiscalía, constituyen un atentado a la dignidad y generan un gran impacto negativo dentro del colectivo judío.
El juicio ha llamado la atención por su relevancia en el contexto de los delitos de odio en redes sociales y la creciente preocupación por el discurso de odio en plataformas digitales. La acusada, que se enfrenta a una condena que podría incluir cárcel y restricciones en el uso de las redes, ha generado un debate sobre los límites de la libertad de expresión y la responsabilidad de los usuarios de internet en cuanto a sus publicaciones.
La sentencia de este juicio, que podría sentar un precedente en España respecto a la legislación sobre los delitos de odio cometidos a través de las redes sociales, se espera que sea emitida en las próximas semanas.