«Apostamos por una política medioambiental basada en una gestión sostenible de calidad», reivindican desde el partido localista
A comienzos de este año 2023 se aprobaban los Planes de Gestión de Riesgos de Inundaciones (PGRI). Esta aprobación supone disponer de herramientas y presupuesto para planificar y reducir el riesgo de inundaciones en toda la geografía española durante los próximos años.
Desde el MDyC plantean la necesidad de actuar con medidas sostenibles que sustituyan a las «drásticas y antiestéticas» medidas de cementación utilizadas por el Ejecutivo local como ocurrió con el muro de contención levantado en la desembocadura del arroyo de Calamocarro. Unas medidas ecológicas que, según señalan desde el partido localista, son más acordes con la recuperación de hábitats y adecuación de espacios urbanos y que se están implantando en distintas ciudades con éxito.
«En el Movimiento apostamos por ese camino y por tanto, nuestra política medioambiental está basada en una Gestión Ambiental de calidad», reivindica Fatima Hamed. En los Mapas de peligrosidad y riesgos de inundaciones elaborados por la Confederación Hidrográfica, se señalan para el territorio de Ceuta siete tramos de alto riesgo. Para el MDyC, en algunos de ellos es necesario actuar en prevención de las lluvias torrenciales anuales que ya provocan inundaciones desde hace años.
Son zonas de alto riesgo de inundación: Benítez y Arcos Quebrados, en los que se puede ver comprometida también la seguridad de las personas, desde el Movimiento apostuestan por llevar a cabo actuaciones estructurales con la intención de capturar la escorrentía y evitar las inundaciones.
Se trata de crear espacios que recojan y luego vayan filtrando en el suelo poco a poco la abundante agua de lluvia y evitar así que llegue a la red de pluviales y se desborde provocando la inundación. Estos espacios están creados escalonadamente en la pendiente de las zonas inundables, formando el llamado “jardín de lluvia”, espacios con plantas perennes y vegetación autóctona capaces de retener y absorber el agua cuando cae torrencialmente.
«Lo que planteamos es otra forma de gestionar la política de medioambiente, y es que en el Movimiento somos conscientes que el Ejecutivo local ha sido y es incapaz de establecer las medidas sostenibles necesarias en ningún ámbito de su política y especialmente en su política ambiental dónde es evidente la desidia y dejadez más absoluta», finalizan.